Bloomberg — Sam Altman, CEO de OpenAI, declaró que no descartaría ayudar al Pentágono a desarrollar una nueva plataforma armamentística, lo que supone el último indicio de un cambio en la forma en que las empresas de IA se plantean trabajar con la industria de defensa.
“Jamás diré nunca, pues el mundo podría tornarse realmente extraño”, declaró Altman este jueves durante su intervención en la Cumbre de Vanderbilt sobre Conflictos Modernos y Amenazas Emergentes.
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No obstante, Altman advirtió que no prevé trabajar en una plataforma de esta naturaleza para el Pentágono “en un futuro próximo”, a no ser que se trate de un intercambio entre opciones realmente malas.
“No creo que la mayor parte del mundo desee que la inteligencia artificial tome decisiones sobre armamento”, señaló en la conversación con Paul Nakasone, exdirector de la Agencia de Seguridad Nacional y actual miembro de la junta directiva de OpenAI.
Los contratos de defensa han sido históricamente controvertidos con los empleados de las empresas de tecnología de consumo, lo que incluso desencadenó importantes protestas dentro de Google en 2018.
Sin embargo, la industria de la IA se ha mostrado recientemente más receptiva a este tipo de acuerdos. OpenAI, en particular, revisó su política de colaboración en seguridad nacional durante el último año, incluyendo el anuncio en diciembre de una alianza estratégica con la empresa de tecnología de defensa Anduril Industries Inc. para desarrollar tecnología antidrones.
Más allá de la defensa, Altman dijo que el gobierno necesita comenzar a poner más esfuerzo en aprender a usar e integrar herramientas de IA.
“No creo que la adopción de la IA en el gobierno haya sido tan sólida como podría haberse esperado”, afirmó. Añadió que habrá sistemas de IA “excepcionalmente inteligentes” para finales del próximo año.
Altman y Nakasone, general retirado del ejército de cuatro estrellas, hablaron antes del lanzamiento del próximo modelo de razonamiento 03 de OpenAI, previsto para la próxima semana. Entre el público se encontraban cientos de miembros del personal militar y de inteligencia, así como académicos.
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