Bloomberg — La Casa Blanca ha comenzado a contratar más personal en el Consejo de Seguridad Nacional, dijeron personas familiarizadas con el asunto, dando marcha atrás después de que el presidente Donald Trump recortara significativamente el tamaño del consejo y mientras EE.UU. se enfrenta a una serie de crisis de política exterior.
La reposición de personal se está haciendo bajo la dirección del secretario de Estado Marco Rubio, que ha actuado como asesor de seguridad nacional en funciones en los meses transcurridos desde que Mike Waltz fue destituido en mayo. Gran parte del consejo fue despedido tras la salida de Waltz, ya que Trump trató de minimizar el papel del NSC en la toma de decisiones de política exterior.
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A algunas personas que fueron despedidas a principios de este año se les ha planteado la posibilidad de volver, según personas familiarizadas con las conversaciones.
Las nuevas contrataciones son parte de un esfuerzo de reestructuración de Rubio y no una respuesta directa a los acontecimientos actuales, dijo un miembro del personal, que pidió no ser identificado al hablar de deliberaciones privadas.
Después de que la Casa Blanca echara a decenas de empleados del NSC en mayo, se quedó sólo con unas pocas docenas, según una persona familiarizada con el asunto. La Casa Blanca buscaba transformar el consejo en una organización más pequeña centrada en implementar las políticas de Trump en lugar de ayudar a darles forma.
La medida indica que la administración está buscando más ayuda para hacer frente a los desafíos de la política exterior, incluida la tensa relación con China, el continuo conflicto de Israel en Gaza, las secuelas de los ataques estadounidenses e israelíes contra Irán y la guerra en Ucrania.
Desde el inicio de su segundo mandato, Trump ha dejado de lado en repetidas ocasiones al NSC y, en su lugar, ha confiado en sus propios instintos y en un grupo cercano de leales, como el enviado especial estadounidense y amigo desde hace tiempo Steve Witkoff, un magnate inmobiliario de Nueva York sin experiencia diplomática previa, para llevar a cabo misiones diplomáticas.
Antes de la reducción a gran escala del mes pasado, varios altos cargos fueron destituidos por separado después de que la activista de extrema derecha Laura Loomer planteara dudas sobre su lealtad a Trump.
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El NSC, que en su nivel más alto incluye al asesor de seguridad nacional, al vicepresidente, a los secretarios de Estado y de Defensa y a otros, fue creado en 1947 para coordinar la política exterior, de defensa e interior de todo el gobierno para garantizar que el presidente tenga en cuenta múltiples factores a la hora de tomar decisiones.
El tamaño del NSC creció constantemente, pasando de una docena de empleados en sus inicios a más de 400 bajo el mandato del expresidente Barack Obama. Algunos aliados de Trump han dicho desde hace tiempo que el NSC debería haber sufrido recortes, tras haberse hinchado bajo presidentes anteriores que dependían en gran medida de él para hacer política.
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