Bloomberg — La confianza de los consumidores estadounidenses cayó inesperadamente al segundo nivel más bajo registrado y las expectativas de inflación subieron a máximos de varias décadas en medio de la creciente preocupación por los aranceles.
El índice preliminar de confianza de mayo bajó a 50,8 desde los 52,2 del mes anterior, según la Universidad de Michigan. Esa cifra fue inferior a todas las estimaciones, salvo una, de una encuesta de Bloomberg entre economistas.
Casi tres cuartas partes de los encuestados mencionaron espontáneamente los aranceles, lo que indica que la política comercial sigue dominando la opinión de los consumidores sobre la economía. El tema cruza las líneas partidistas, incluyendo una notable proporción de republicanos que lo mencionaron.
La encuesta se realizó entre el 22 de abril y el 13 de mayo, un periodo que finalizó justo después de que EE.UU. y China acordaran reducir temporalmente sus aranceles mutuamente mientras negocian un acuerdo comercial.
Aún así, “es poco probable que las pausas temporales convenzan a los consumidores de que la política comercial se ha estabilizado lo suficiente como para que los consumidores o las empresas puedan planificar eficazmente el futuro”, afirmó en un comunicado Joanne Hsu, directora de la encuesta.
Los consumidores esperan que los precios suban a un ritmo anual del 7,3% durante el próximo año, el más alto desde 1981, según mostraron los datos publicados este viernes. Consideran que los costos aumentarán a un ritmo anual del 4,6% durante los próximos cinco a diez años, el más alto desde 1991.
A pesar de la creciente preocupación de los consumidores por que los aranceles hagan subir los precios, los últimos informes ilustraban unas presiones inflacionistas limitadas. Los datos del gobierno mostraron que los precios al consumo menos los alimentos y la energía subieron en abril menos de lo previsto por tercer mes consecutivo.
El contraste entre la confianza y el gasto real también se muestra en algunas partes de la encuesta. La medida de las condiciones de compra de grandes artículos mejoró ligeramente, aunque solo una pequeña parte de los consumidores espera seguir gastando como de costumbre si los precios siguen subiendo.
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La encuesta también mostró que el índice de expectativas descendió casi un punto, hasta 46,5, el nivel más bajo en casi 45 años. El indicador de las condiciones actuales retrocedió 2,2 puntos hasta situarse en 57,6.
La opinión de los consumidores sobre sus finanzas personales actuales cayó al nivel más bajo desde 2009. Las expectativas financieras cayeron a un nuevo mínimo histórico.
Aunque casi dos tercios de los encuestados republicanos ofrecieron comentarios no solicitados sobre los aranceles, su sentimiento general sigue siendo elevado en comparación con los demócratas y los independientes políticos.
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