Bloomberg — La Corte Suprema de Estados Unidos extendió la suspensión de US$4.000 millones en ayuda alimentaria, lo que probablemente garantiza que millones de familias de bajos ingresos no recibirán asistencia hasta que el Congreso reabra el gobierno y proporcione los beneficios completos.
Poniéndose del lado de la administración del presidente Donald Trump, los magistrados dijeron que mantendrán un bloqueo a los fallos de tribunales inferiores que requerirían el pago inmediato de los beneficios completos del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria este mes para 42 millones de beneficiarios. El juez Ketanji Brown Jackson disintió.
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La administración dijo el lunes al Tribunal Supremo que permitir las prestaciones completas del SNAP de forma inmediata supondría el riesgo de echar por tierra el acuerdo que los republicanos alcanzaron con ocho demócratas del Senado para permitir la reapertura del gobierno. El tribunal debería “dejar que el proceso político que se está desarrollando rápidamente llegue a su conclusión”, argumentó la administración.
Los grupos que demandan el restablecimiento de las prestaciones completas dijeron que ese argumento demostraba que la administración estaba utilizando el hambre con fines políticos.
La postura de la administración “confirma lo que ha estado claro todo el tiempo: que el gobierno está aprovechando el SNAP para obtener ventajas políticas partidistas en la lucha por el cierre”, argumentaron los grupos liderados por el Consejo de Iglesias de Rhode Island. “Este tribunal no debería participar en ese esfuerzo”.
El Senado aprobó el acuerdo presupuestario el lunes por la noche y la Cámara tiene previsto votar el miércoles, cuando regrese de una ausencia de varias semanas. Como se espera que Trump firme la legislación, el gobierno podría reabrir el jueves. El cierre del gobierno ha sido el más largo de la historia con 42 días hasta ahora.
Un abogado del Departamento de Justicia dijo el lunes en un caso judicial diferente que el Departamento de Agricultura de EE.UU., que administra el SNAP, tardaría 24 horas en poner a disposición todas las prestaciones de noviembre.
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El departamento y otras agencias estadounidenses dicen que el gobierno ahora mismo no tiene suficiente dinero para financiar completamente los beneficios del SNAP para noviembre. La administración sostuvo que los tribunales son impotentes para revisar su gestión del cierre, incluida su decisión de reducir la ayuda alimentaria.
El juez de distrito estadounidense John McConnell en Rhode Island dijo la semana pasada que la oferta de la administración de pagos parciales era inadecuada porque las complejidades de ese enfoque retrasarían la distribución del dinero. “Las pruebas demuestran que la gente pasará hambre”, dijo McConnell.
El juez Jackson dejó en suspenso temporalmente las resoluciones de McConnell el viernes por la noche. Su orden habría expirado justo antes de la medianoche del martes si el Tribunal Supremo no hubiera intervenido de nuevo.
La nueva orden, que el Tribunal Supremo calificó de “suspensión administrativa”, durará hasta el jueves por la noche, momento en el que se espera que el gobierno esté abierto.
La cuestión era si el Departamento de Agricultura necesitaba utilizar las reservas disponibles, incluido el dinero de los programas de nutrición infantil, para evitar un déficit del SNAP. El gobierno dijo que recurrir a esos programas los pondría en peligro, una afirmación que McConnell calificó de “inverosímil”.
El caso ante el Tribunal Supremo es Rollins contra el Consejo Estatal de Iglesias de Rhode Island, 25a539.
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