Bloomberg — El presidente Donald Trump se reunirá la próxima semana con los líderes de algunas de las mayores empresas tecnológicas del país, que se enfrentan a la perspectiva de aranceles a la importación y normas de exportación más estrictas que podrían poner en aprietos sus negocios.
Un grupo que incluye a los CEO de HP Inc (HPQ), Intel Corp (INTC), International Business Machines Corp (IBM) y Qualcomm Inc (QCOM) ha hablado de reunirse con la administración el lunes, según personas familiarizadas con el asunto que pidieron no ser identificadas porque los planes no son públicos.
HP confirmó que la empresa estaría presente el lunes. “Algunos de los temas más importantes para nuestro equipo directivo son la política comercial y la fabricación estadounidense”, dijo un representante.
Los portavoces de Intel, IBM y Qualcomm declinaron hacer comentarios. Un representante de la Casa Blanca no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.
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La Casa Blanca ha promovido una serie de cambios políticos que amenazan con hacer tambalearse a la industria del hardware informático. Los aranceles encarecerán centros de fabricación como China y podrían alterar las cadenas de suministro. Las empresas tecnológicas también quieren claridad sobre qué restricciones podrían imponerse a su exportación de tecnología avanzada para centros de datos de inteligencia artificial, que se están construyendo en todo el mundo.
Trump ha prometido cumplir su promesa electoral de imponer aranceles a socios comerciales clave, en un intento de compensar lo que califica de saldos injustos. Los cambios harían más difícil para la industria electrónica operar de la forma globalmente segmentada que la ha hecho tan eficiente.
La administración está elaborando un plan de acción sobre la IA, con el que pretende “mantener y mejorar” el liderazgo de Estados Unidos en este campo, y está recabando la opinión del público al respecto.
El presidente también ha pedido al Congreso que revoque la Ley de Chips de 2022, una legislación bipartidista que está proporcionando miles de millones de dólares en incentivos a empresas como Intel y Taiwan Semiconductor Manufacturing Co. (TSM).
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“Su Ley Chips es una cosa horrible, horrible”, dijo Trump durante un discurso ante el Congreso el martes, implorando al presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, que se deshiciera de la legislación. El líder demócrata del Senado, Chuck Schumer, que negoció la ley, predijo el miércoles que la petición de Trump fracasaría.
Por otra parte, Trump organizó esta semana un acto con TSMC en el que el fabricante de chips se comprometió a invertir US$100.000 millones adicionales en plantas estadounidenses. La administración ha señalado el acuerdo como una señal de que el país puede utilizar aranceles, en lugar de incentivos al estilo de la Ley de Chips, para atraer inversiones.
Con la colaboración de Jenny Leonard.
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