Bloomberg — La presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, afirmó que un mayor comercio en la región podría ayudar a compensar las pérdidas sufridas como consecuencia de la fragmentación mundial.
En una visita sorpresa a Kiev, recordó que la mayor parte de las exportaciones de la zona euro se dirigen a otros países europeos, como el Reino Unido, Suiza y Noruega.
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“Profundizando los lazos económicos, vinculando más estrechamente a las economías vecinas, podemos reducir nuestra exposición a los choques externos”, dijo Lagarde en un discurso. “El aumento del comercio dentro de nuestra región puede ayudar a compensar las pérdidas en los mercados mundiales”.
La comparecencia de Lagarde en la capital ucraniana, anteriormente programada sólo de forma remota, está en línea con su anterior apoyo al país en su lucha contra la invasión rusa. El BCE ha calificado constantemente la guerra de “injustificada” en su comunicado oficial y el presidente calificó el ataque de “parteaguas” para Europa inmediatamente después.
“Ucrania se encuentra en un momento crucial: se enfrenta a las dificultades de la guerra, al reto de la reconstrucción y a la oportunidad de una integración regional más profunda”, declaró Lagarde. “En un mundo marcado por realidades geopolíticas cambiantes, dicha integración ofrece un camino claro hacia la recuperación y la prosperidad duradera”.
Las secuelas de la guerra han tenido importantes implicaciones para el BCE, ya que el repunte de los costes energéticos llevó la inflación de la eurozona a más del 10% en 2022. El aumento de los precios ha remitido desde entonces, lo que ha permitido a los responsables políticos recortar las tasas de interés ocho veces desde junio del año pasado.
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Tras el último movimiento a principios de este mes, los funcionarios han señalado que preferirían hacer una pausa por ahora, también para evaluar el impacto de los aranceles estadounidenses que bien podrían cambiar tras las negociaciones con la Unión Europea.
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