Bloomberg — Los beneficios del segundo trimestre fiscal de Visa Inc. (V) superaron las estimaciones de los analistas, ya que el gasto en su red de pagos se mantuvo firme a pesar de las incertidumbres macroeconómicas.
Los ingresos netos aumentaron un 6% hasta los US$5.440 millones, mientras que los beneficios ajustados por acción ascendieron a US$2,76, superando las expectativas de US$2,68 para los tres meses hasta marzo. El volumen de pagos se situó en US$3,34 billones, por debajo de los US$3,42 billones previstos.
“El gasto de los consumidores se mantuvo resistente, incluso con la incertidumbre macroeconómica”, declaró el martes en un comunicado el consejero delegado Ryan McInerney.
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Los resultados de la firma con sede en San Francisco reiteraron lo que otras empresas financieras han dicho sobre la salud fiscal de los consumidores estadounidenses: por ahora siguen gastando, pero los desafíos económicos se ciernen en medio de la guerra arancelaria del presidente Donald Trump, enturbiando las expectativas futuras.
También el martes, Visa dijo que su consejo autorizó un nuevo programa plurianual de recompra de acciones por valor de US$30.000 millones.
Las acciones de Visa subían un 2,3% a las 16:17 en las últimas operaciones de Nueva York.
Visa también se está posicionando para aprovechar una porción mayor de todas las transacciones, ya que los métodos que los particulares y las empresas utilizan para los pagos siguen evolucionando. Por ejemplo, McInerney dijo en el día del inversor de Visa en febrero que las transacciones de stablecoin aumentaron un 40% en los últimos dos años.
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La empresa también dijo en el día del inversor que espera que sus servicios de valor añadido, aquellos que no son las ofertas tradicionales que uno podría asociar con la empresa, como las tecnologías antifraude, representen más de la mitad de los ingresos totales en los próximos años.
Visa mantuvo su previsión de que los beneficios por acción para el ejercicio fiscal crezcan en un porcentaje en torno a los diez puntos porcentuales bajos, y que los ingresos netos aumenten en un porcentaje en torno a los dos dígitos bajos.
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