Bloomberg — Nvidia Corp. quiere consolidar su posición en el centro del auge de la inteligencia artificial y para ello ha presentado sus planes para crear chips más potentes, un modelo para robótica y “superordenadores personales de IA” que permitirán a los desarrolladores trabajar en máquinas de sobremesa.
En su intervención en el evento anual GTC de la compañía en San José (California), el CEO Jensen Huang reveló una plataforma llamada Isaac GR00T N1 que “sobrealimentará el desarrollo de robots humanoides”. Nvidia está trabajando con Walt Disney Co. y DeepMind de Google en el proyecto, que estará abierto a desarrolladores externos.
La conferencia GTC, antaño una reunión poco conocida de desarrolladores, se ha convertido en un acontecimiento muy seguido desde que Nvidia asumió un papel central en la IA, y el mundo tecnológico y Wall Street se han fijado en la presentación. Huang presentó una gran variedad de hardware, software y servicios durante su discurso de aproximadamente dos horas, aunque no hubo revelaciones bomba para los inversores. Las acciones cayeron más de un 3% este martes.
Durante su discurso Huang afirmó que Nvidia estaba trabajando con General Motors para utilizar la IA en la próxima generación de automóviles, fábricas y robots. El proyecto inalámbrico, por su parte, involucra a empresas como T-Mobile US Inc. (TMUS) y Cisco Systems Inc. (CSCO). Nvidia ayudará a crear hardware de red inalámbrica “nativo de IA” para las nuevas redes 6G, sucesoras de la actual 5G.
Dell Technologies Inc, HP Inc y otros fabricantes, por su parte, fabricarán los nuevos sistemas de superordenadores personales. Huang también presentó un sucesor del procesador de IA insignia de Nvidia llamado Blackwell Ultra. A esta línea de chips, prevista para la segunda mitad de 2025, le seguirá una actualización más espectacular denominada “Vera Rubin” en la segunda mitad de 2026.
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Es un momento crucial para Nvidia. Tras dos años de crecimiento estratosférico, tanto en ingresos como en valor de mercado, los inversores en 2025 han comenzado a cuestionar si este frenesí es sostenible. Estas preocupaciones se pusieron de manifiesto a principios de este año cuando la startup china DeepSeek anunció que había desarrollado un modelo de IA competitivo utilizando una fracción de los recursos.
La afirmación de DeepSeek generó dudas sobre si el ritmo de inversión en infraestructura informática de IA estaba justificado. Sin embargo, a esto le siguieron los compromisos de los principales clientes de Nvidia, un grupo que incluye a Microsoft Corp. (MSFT) y AWS de Amazon.com Inc. (AMZN), de mantener la inversión este año.
Se proyecta que los mayores operadores de centros de datos —un grupo conocido como hiperescaladores— invertirán US$371.000 millones en instalaciones de IA y recursos informáticos en 2025, un aumento del 44 % con respecto al año anterior, según un informe de Bloomberg Intelligence publicado el lunes.
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Se prevé que esa cantidad alcance los US$525.000 millones para 2032, creciendo a un ritmo superior al previsto por los analistas antes del éxito viral de DeepSeek.
Sin embargo, la preocupación general por las guerras comerciales y una posible recesión ha lastrado las acciones de Nvidia, que han caído un 14% este año. Las acciones cayeron un 3,3%, hasta los US$115,53, en la sesión bursátil de Nueva York de este martes.
La noticia de GM perjudicó las acciones de Mobileye Global Inc., empresa que desarrolla tecnología de conducción autónoma. Las acciones cayeron hasta un 3,5%, hasta los US$14,44. La compañía, propiedad mayoritaria de Intel Corp. (INTC), realizó su oferta pública inicial en 2022.
El evento GTC, de una semana de duración y que ha invadido el centro de San José, es una oportunidad para convencer a la industria tecnológica de que los chips de Nvidia siguen siendo imprescindibles para la IA, un campo que Huang espera que se extienda a un mayor sector de la economía en lo que él denomina una nueva revolución industrial. Huang señaló que el evento ha sido descrito como el “Super Bowl de la IA”.

El tema más importante que Huang puede abordar es si el gasto de capital en IA seguirá aumentando en 2026, según declaró el analista de Wolfe Research, Chris Caso, en una nota previa al evento.
“Las acciones de IA han caído drásticamente por el temor a una recesión, y aunque creemos que el gasto en IA es el último sector en el que los clientes de la nube querrían recortar presupuestos, si las áreas que financian esos presupuestos sufren, esto podría ejercer cierta presión sobre el gasto de capital", señaló Caso.
La gama actual de chips de gama alta de la compañía se basa en un diseño llamado Blackwell. Algunas versiones anteriores de este procesador requirieron correcciones, lo que retrasó su lanzamiento. Nvidia ha afirmado que estos problemas son la solución, pero la compañía aún no cuenta con suficiente suministro para satisfacer la demanda. Ha aumentado la inversión para comercializar más chips, lo que afectará los márgenes este año.
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Huang afirmó que los cuatro principales proveedores de nube pública (Amazon, Microsoft, Google (de Alphabet Inc. (GOOGL) y Oracle Corp. (ORCL)) adquirieron 1,3 millones de chips de IA Hopper de Nvidia de generación anterior el año pasado. En lo que va de 2025, el mismo grupo ha adquirido 3,6 millones de chips de IA Blackwell, añadió.
Después de que Vera Rubin se estrene en la segunda mitad del año que viene, Nvidia tiene previsto lanzar una versión un año más tarde llamada Rubin Ultra. Vera Rubin fue una astrónoma estadounidense a la que se atribuye el descubrimiento de la materia oscura.
La siguiente generación de chips se llamará Feynman, según Huang. Es probable que el nombre haga referencia a Richard Feynman, físico teórico estadounidense que contribuyó a la mecánica cuántica.
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