Bloomberg — Las ventas de vehículos eléctricos de Xiaomi Corp. en China se han resentido desde marzo tras un accidente mortal en una autopista y el descontento de los consumidores en torno a la comercialización de una versión de su coche.
Los pedidos del sedán SU7 de Xiaomi se desplomaron a unas 36.000 unidades en abril, un 55% menos intermensual, según escribió Deutsche Bank AG en una nota. “Esta tendencia se extendió a mayo”, dijeron los analistas de automóviles dirigidos por Bin Wang.
Las entregas también se están resintiendo, dijo el banco de inversión, con volúmenes a la baja secuencialmente en las últimas cuatro semanas, de 7.200 en la tercera semana de abril a solo 5.200 unidades en la segunda semana de mayo.
Los medios de comunicación locales informaron a principios de este mes de que más de 300 personas querían cancelar sus pedidos del SU7 Ultra EV por la falsa publicidad sobre el diseño del capó del vehículo. Fue el último disgusto para Xiaomi después de que un accidente mortal en el que se vieron implicadas una de sus berlinas SU7 provocara la muerte de tres personas a finales de marzo.
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El informe del Deutsche Bank citaba el accidente entre varias razones para la caída de las ventas, así como la “reciente disputa sobre el capó delantero opcional de fibra de carbono” para la versión de coche de carreras del SU7, que los consumidores han argumentado que son solo dos agujeros y algunas estructuras de plástico en lugar de los conductos de aire prometidos para mejorar la aerodinámica y la refrigeración.
Las acciones de Xiaomi en Hong Kong cayeron hasta un 1,4% este jueves, recortando las ganancias de este año a alrededor del 44,6%.
Los datos de Citi Research muestran que desde principios de año, cuando las ventas suelen ser lentas, los pedidos de la berlina SU7 pasaron de 53.000 en febrero a 83.400 en marzo. Pero se produjo un fuerte descenso en abril hasta los 35.600, el mes posterior al accidente. Mientras tanto, las ventas al por menor cayeron de 29.200 en marzo a 27.200 un mes después.
Bloomberg informó en abril de que Xiaomi ha retrasado el debut de su primer utilitario deportivo, el YU7.
Li Yanwei, de la Asociación de Concesionarios de Automóviles de China, también publicó un análisis el miércoles en su cuenta de Weibo, mostrando que las ventas de coches de Xiaomi han estado cayendo desde mediados de abril.
Además de afectar a la demanda de los consumidores, el accidente ha hecho que se preste más atención a la seguridad de los vehículos eléctricos.
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Las autoridades chinas han endurecido la promoción y el despliegue de los sistemas avanzados de asistencia al conductor, ya que el VE de Xiaomi tenía activada la función de piloto automático en el momento del accidente. También se están estableciendo nuevas normas para la estabilidad de la batería y los tiradores empotrados en las puertas, muy populares en los coches eléctricos pero que pueden quedar inoperativos en caso de emergencia si el VE pierde potencia.
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