Bloomberg — Un investigador líder detrás del asistente de voz de OpenAI ha recaudado US$40 millones en financiación de la firma de capital riesgo Andreessen Horowitz para una nueva startup de inteligencia artificial (IA) centrada en ayudar a las personas a tener mejores conversaciones habladas con los ordenadores.
WaveForms AI, que se lanzó este lunes, está trabajando en un software de audio de IA para captar las señales emocionales y permitir interacciones verbales más fluidas con las máquinas, según declaró a Bloomberg News el cofundador y CEO Alexis Conneau. El financiamiento inicial valora WaveForms en US$200 millones, dijo la compañía.
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La startup es una de las cada vez más numerosas empresas de IA que van más allá de los chatbots basados en texto para ofrecer funciones de voz que suenen humanas. La tecnología ofrece la promesa de crear asistentes digitales y agentes de atención al cliente más versátiles, entre otros casos de uso.
En OpenAI, Conneau desarrolló el modo de voz avanzado de la empresa, destinado a responder en tiempo casi real a las peticiones habladas de los usuarios con una voz propia dinámica que suena humana. Conneau dejó OpenAI en agosto y empezó a trabajar en WaveForms, con sede en San Francisco, en septiembre, el mismo mes en que OpenAI puso el asistente de voz a disposición de todos sus usuarios de pago de ChatGPT.
Conneau dijo que WaveForms tiene como objetivo construir una IA que pueda producir interacciones de voz más inmersivas. Se trata de un reto que implica desarrollar un software que pueda interpretar no solo las palabras que utiliza la gente, sino también cómo habla, sin estar específicamente entrenado de antemano en todos los matices de su forma de interactuar, explicó Conneau.
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Por ejemplo, un asistente de voz de IA podría tener que captar los titubeos en la voz de una persona durante una conversación sobre un problema de matemáticas y utilizar esa pista para adaptarse: “Si usted se frustra un poco, también podría adaptarse y tranquilizarle un poco”, dijo Conneau. El asistente podría entonces responder diciendo: “No pasa nada. Es un contenido complicado. Demos un paso atrás y vayamos paso a paso para que entienda este concepto”.
WaveForms es aún pequeña, sin producto todavía y con solo cinco empleados, incluida su cofundadora Coralie Lemaitre, casada con Conneau y que trabajó anteriormente en Google.
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