Bloomberg Línea — La reforma pensional que aprobó el Congreso en 2024 entrará en vigor el primero de julio, pero los preparativos para el funcionamiento del Fondo de Ahorro a cargo del Banco de la República aún no están al 100%, según su gerente, Leonardo Villar.
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“No es fácil que salga todo lo que hay que hacer para prepararse para que entre en vigencia el funcionamiento del fondo”, dijo Villar, quien, a pesar de reconocer un diálogo fluido y constructivo con el Gobierno, en especial la Unidad de Regulación Financiera, advierte que “eso hace que la posibilidad de avanzar y de empezar a funcionar a tiempo, de una manera adecuada, esté en entredicho”.
A 20 días de que las nuevas normas entren en vigor, Villar sostiene que “nos falta firmar el contrato con el Gobierno y no sabemos cómo va a resultar eso”.
El gerente del banco central colombiano dice que desde la autoridad monetaria esperaban tener la regulación definida en diciembre pasado para comenzar una convocatoria para definir a los administradores de los portafolios delegados.
“Son procesos que se demoran seis a ocho meses porque son complejos”, dijo Villar, quien recordó, además, que serán esos administradores delegados los que en realidad estarán a cargo de la administración de los recursos.
Ante la premura que hay para finiquitar los detalles, Villar explica que se evalúa pedir acompañamiento de la Procuraduría y la Contraloría para que supervisen los procesos con los que elegirán a los administradores.
“Hemos tenido una buena receptividad de parte del Ministerio de Hacienda para avanzar muy rápido en el convenio entre el banco y el Gobierno”, dijo el gerente. En ese sentido, espera “buscar mecanismos para poder hacer las contrataciones de los primeros administradores delegados de la manera más ágil”.
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Asegura que el Gobierno aceptó la configuración de un periodo de transición, por lo cual destaca que eso permitirá que “el fondo se vaya conformando poco a poco en muchos sentidos”.
Frente fiscal no sale del radar
Villar evita especular sobre el déficit fiscal y una eventual activación de la cláusula de escape a la regla fiscal, sin embargo, reconoce que es un problema que se hace cada vez más relevante para la economía colombiana.
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“El panorama es complejo”, dice el gerente, y explica, que Colombia pasó de tener una deuda de alrededor del 40% del PIB hace 15 años, a 60% del PIB en pandemia, situación que se corrigió “al inicio de este Gobierno. Bajó al 53% y había buenas expectativas”.
Sin embargo, dice, el año pasado la deuda volvió a subirse al 60% del PIB “y la perspectiva para este año era que se mantuviera en ese nivel, lo cual ya era muy negativo”, y advierte que, “un déficit superior a eso implica que la deuda aumenta como proporción del PIB”.
No hace referencia a si debería o no haber un recorte presupuestal, pero asegura que hay expectativa por conocer el Marco Fiscal de Mediano Plazo que se publicará este viernes, y espera que “ese déficit se ubique en un nivel razonablemente cercano a ese 5,1% del PIB que se había anunciado previamente”.
Pero, además, ve necesario que el déficit que se proyecte lo haga “de una forma creíble dado el comportamiento de los recaudos tributarios que estamos obteniendo”.
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Crisis fiscal entorpece reducción de tasas
El gerente del banco central recuerda que la mayoría de las sesiones de Junta de 2024 terminaron con recortes de tasas, casi todas de medio punto porcentual, pero que la infortunada sorpresa fiscal del cierre de año, junto con factores externos, han cambiado el panorama.
“Eso ha hecho más difícil el proceso”, dice Villar, y complementa que “ha implicado que el proceso de reducción de la tasa de interés haya sido mucho más lento en los últimos seis meses de lo que había sido en todo el año anterior”.
Pese a ello, defendió el recorte de tasas de interés de 25 puntos base en abril, pues explicó que “en ese momento las expectativas de inflación estaban comportándose de una manera un poco más positiva”.
Al momento de esta entrevista aún no se conocía el dato de inflación de mayo que entregó el DANE el lunes en la noche y que dejó el IPC de 12 meses en 5,05%.
Y agregó Villar que “sobre esa base, en la junta de finales del mes de junio, se podrán tomar las decisiones que sean más convenientes”.
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En 2026 sí
Villar reconoce que la meta de inflación difícilmente se alcanzará este año, pues todos los modelos y las expectativas apuntan a que estará por encima del rango meta de 2% a 4%.
Pese a ello, advierte que la inflación en 2026 estará nuevamente dentro de rango de tolerancia que maneja el Emisor.
“Para el año entrante estaríamos cumpliendo con la meta del 3%, por lo menos en el sentido de estar dentro del rango de más o menos un punto porcentual alrededor de esa meta”, sostiene Villar.
Además, dice que no es solamente la proyección del banco, sino que las expectativas y los informes de analistas del mercado también apuntan en esa dirección.
Pero no desconoce que en el camino a ese objetivo “hay muchos temas a monitorear”, y entre ellos destaca lo que suceda hacia adelante con Estados Unidos.
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“Era el líder mundial de la libertad de comercio durante más de 100 años y de golpe resulta siendo el país más proteccionista de todos, pues ha generado impactos muy importantes”, explica.
Indica que si bien uno de los estragos que causa la nueva política comercial norteamericana está ligada al efecto sobre las exportaciones colombianas hacia allá, no se puede perder de vista el impacto que tiene sobre el mercado financiero “porque la incertidumbre hace que la tasa de interés de largo plazo se aumente”.
Positivo por donde se mire
El gerente Villar explica que, si bien hay temas ligados a la mejora de la tasa de desempleo que, según el Departamento Nacional de Estadística fue del 8,8% para mayo de 2025, “ese es un buen dato por donde se le mire”.
Incluso, lo ve como un ejemplo de que las tasas de interés del banco central colombiano no han afectado el comportamiento de los puestos de trabajo.
“Contrasta con tantos anuncios de que las tasas de interés del Banco de la República iban a generar una gran recesión”, controvierte Villar.
Pese a ello, el banquero muestra su preocupación porque “la tasa de desempleo de Colombia es de las más altas de la región y de las economías emergentes del mundo”.
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En ese sentido, asegura que hay que tener eso muy en cuenta porque es una muestra que “en Colombia tenemos un mercado laboral que no funciona bien”, y pide ver “por qué no funciona bien y ser muy cuidadosos por las políticas que se adopten al respecto”.
Además, pide no desconocer que, si bien la creación de empleos ha sido importante en el último año, “un porcentaje importante del empleo es empleo informal”.
Destaca el gerente que ese empleo por cuenta propia, en muchos casos, no cumple con las normas laborales, gana menos de un salario mínimo, no contribuye a la seguridad social y por lo tanto no tiene la protección correspondiente, lo cual genera preocupaciones importantes.
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Rechazo al terrorismo
Tras el atentado del pasado sábado contra el precandidato del Centro Democrático, Miguel Uribe Turbay, el gerente Villar expresó su solidaridad con el senador y su familia.
“Yo empezaría por decir que debemos hacer un rechazo rotundo y muy contundente a la violencia, al ataque contra la vida del senador Miguel Uribe Turbay. Tenemos que confiar en que va a recuperarse”, dijo.
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Y agregó que “es un atentado contra la democracia, un atentado contra las libertades en el país y realmente una situación que no genera buenas expectativas”.
Pidió reflexionar sobre el lenguaje que se usa y la dificultad de entendernos entre los colombianos, “dejar de descalificarnos con adjetivos totalmente inconducentes, desproporcionados, y en ese sentido creo que es muy importante avanzar”.