Ciudad de México — México enfrenta el riesgo de convertirse en un importador neto de petróleo crudo en 2030 ante la mayor caída de producción del mundo, estimó la Agencia Internacional de Energía (IEA por su sigla en inglés) en un reporte.
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La producción mexicana perderá 680.000 barriles diarios de petróleo y caerá hasta 1,29 millones de barriles por día, la mayor caída pronosticada por la agencia no solo entre la Organización de Países Exportadores de Petróleo y aliados (OPEP+), sino entre todos los productores a nivel mundial.
Mientras tanto, el país gobernado por la presidenta Claudia Sheinbaum demandará 1,7 millones de barriles diarios de petróleo cada año durante su sexenio, calculó IEA.
“Sumado al pronóstico de demanda de este informe, esto podría llevar al país a convertirse en un importador neto en cerca de 500.000 barriles diarios para 2030″.
En 2018, la empresa estatal Pemex importó 1,4 millones de barriles de petróleo ligero desde Estados Unidos para mezclarlo con crudo mexicano y poder refinarlo, una medida que el entonces presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, calificó como un “gran fracaso”.
México logró estabilizar un declive productivo de 20 años entre 2021 y 2023, gracias al campo terrestre Quesqui, pero recortó “drásticamente” inversiones planificadas durante la pandemia de Covid-19, mientras el Gobierno del expresidente López Obrador solicitó a la petrolera estatal Pemex que se centrara en el rápido crecimiento de la producción en yacimientos terrestres y aguas superficiales en detrimento de las aguas profundas.
El declive de sus principales activos petroleros, la falta de inversión suficiente y los altos compromisos financieros han limitado las opciones de Pemex
Los retos hacia adelante de Pemex persisten con una alta carga de deuda financiera que asciende a US$101.100 millones, la más abultada entre las petroleras del mundo, con cuatro proyectos importantes programados para compensar el declive petrolero: Trion, Pokol-Chinwol, Zama y una expansión en el actio Ku-Maloob-Zaap.
“Sin embargo, la ventana de producción para estos dos proyectos (Zama y KMZ) antes del final de nuestro pronóstico se está agotando”, dijo IEA.
Aunque el expresidente Andrés Manuel López Obrador priorizó el rescate de Pemex en su administración y prometió producir hasta 2,5 millones de barriles diarios, recortados tras la pandemia a 2 millones diarios, Sheinbaum limitó la producción de Pemex a 1,8 millones de barriles diarios durante su administración para evitar más contaminación, aunque la operación productiva de la compañía se deterioró significativamente en los primeros meses de su Gobierno.
“Estamos trabajando en la parte financiera, con un esquema para los próximos años. Estamos considerando la parte privada, sobre 1,8 millones de barriles diarios. Ya se tiene todo el trabajo para ver qué parte le toca a Pemex, que parte le toca de inversión mixta”, dijo la presidenta Sheinbaum el 23 de junio. al respecto de los planes para impulsar la producción.
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La producción mexicana declinó en 160.000 barriles diarios anuales en el primer semestre de este año.
Los cambios fiscales a Pemex, los adeudos sin pagar a sus proveedores y los recortes presupuestarios en el sector de exploración y producción han provocado que las plataformas petroleras se reduzcan de 50 en octubre de 2024 a menos de 20 en menos de seis meses.
“Recientemente se ha informado de que se han realizado algunos pagos y cinco plataformas han vuelto a funcionar”, dijo IEA.
Sheinbaum destaca reporte de IEA
La mandataria mexicana destacó la publicación de la Agencia sobre la refinería Olmeca, conocida como Dos Bocas, durante su conferencia de prensa matutina en la Ciudad de México el 23 de junio.
“Hubo una publicación de la Agencia Internacional de Energía muy buena sobre la Refinería Dos Bocas”.
IEA dijo en el informe que la refinería Dos Bocas de 340.000 barriles diarios de capacidad ha sufrido grandes retrasos y está actualmente en marcha con la esperanza de que alcance su plena operación hasta 2026.
“Este será un hito importante, además del programa de renovación de seis refinerías de Pemex”, señaló la organización.
La refinería de Pemex disparó su presupuesto inicial de US$8.000 millones hasta más de US$20.000 millones y, aunque se inauguró en julio de 2022, apenas produce una fracción de su capacidad total.
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Sin embargo, si tiene éxito hacia el final de la década, la caída prevista en la producción de crudo mexicano acercará a México a convertirse en un importador neto de crudo y restringirá los suministros de crudo pesado y agrio para las refinerías de la Costa del Golfo de Estados Unidos, concluyó la Agencia.
IEA fue fundada por países importadores de petróleo miembros de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) —considerada como el club de países ricos— luego de la crisis de precios derivado del embargo petrolero de naciones productoras, mayoritariamente de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
