Ciudad de México — Petróleos Mexicanos, la empresa estatal conocida como Pemex, redujo sus importaciones de gasolina durante 2024, pero lejos del objetivo del Gobierno de autosuficiencia en combustibles vehiculares, una promesa hecha desde el sexenio del expresidente Andrés Manuel López Obrador y que mantiene su sucesora, Claudia Sheinbaum.
La petrolera mexicana importó 391.000 barriles diarios de gasolinas de enero a diciembre de 2024, una disminución anual de 6%, de acuerdo con las cifras más recientes de la compañía compiladas por Bloomberg Línea, pero este número es similar al nivel de hace 10 años tras la apertura del sector a la inversión privada.
En la medición mensual, Pemex compró en el extranjero 409.000 barriles por día de gasolina, un repunte de 8% durante diciembre.
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Pemex ha realizado inversiones significativas para reducir las importaciones empezando por la construcción de la refinería Dos Bocas, oficialmente llamada Olmeca, con una capacidad de producción de 170.000 barriles diarios de gasolina y 120.000 más de diésel, pero los retrasos, fase de pruebas y sobrecostos se han extendido durante más de dos años desde su inauguración en 2022 y la compañía produce gasolina en niveles mínimos.
Durante julio de 2024, López Obrador mostró una proyección sobre el déficit de gasolina, diésel y turbosina por 324.000 barriles diarios que se reduciría con la entrada en operación de Dos Bocas y otras obras en refinerías.
La compañía actualmente, dirigida por Víctor Rodríguez Padilla, también enfrentó retrasos durante la gestión de Octavio Romero Oropeza en la construcción de dos plantas coquizadoras en las refinerías de Tula y Salina Cruz con el objetivo de reducir la producción de combustóleo, un petrolífero altamente contaminante con el que Pemex pierde dinero, y obtener más gasolina y diésel.
La secretaria de Energía, Luz Elena González, ha señalado que el plan de refinación del Gobierno saliente continuaría durante la administración de Sheinbaum.
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La demanda de gasolinas en México se osciló en los 700.000 barriles diarios, según las cifras disponibles de la Secretaría de Energía (Sener). Pemex controla el 86% del mercado de gasolina y el resto está en manos de empresas privadas.
El gigante mexicano, no obstante, ha logrado incrementar la producción de gasolinas en 15% anual hasta los 290.000 barriles diarios el año pasado.
Los incrementos en refinación petrolera fueron encabezados por los complejos de Madero, Cadereyta, Salamanca y Minatitlán, mientras que Tula y Salina Cruz registraron disminuciones.
La compañía pasa por una crisis ante impagos a proveedores que ascienden a US$20.000 millones, mientras su producción petrolera, el principal negocio de Pemex, ha borrado el avance que tuvo durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador con una producción que se ubica en 1,7 millones de barriles diarios.
La presidenta Sheinbaum ha enviado al Congreso mexicano las leyes secundarias de Pemex luego de una reforma a la Constitución para quitar su carácter mercantil por uno de servicio público, pero con apertura a alianzas con el sector privado.
