UBS recorta proyección sobre el dólar en México y ve contracción económica en 2025

Los analistas recortaron su previsión del tipo de cambio para 2025 y 2026 ante un dólar debilitado y la solidez del peso frente a tensiones comerciales y ajustes monetarios.

A pesar de los recortes de Banxico y la incertidumbre comercial, el peso mexicano conserva una posición sólida frente al dólar, según UBS.
24 de julio, 2025 | 09:07 AM

Bloomberg Línea — UBS ve un dólar más barato en comparación con sus pronósticos anteriores, gracias a la fortaleza que ha mantenido el peso mexicano en medio de un entorno marcado por la incertidumbre comercial y los recortes de tasas del Banco de México.

Según el análisis, el tipo de cambio seguirá una tendencia a la baja, apoyado por una expectativa de debilidad generalizada del billete verde.

PUBLICIDAD

Ver más: Coca-Cola variará edulcorante en EE.UU.: importaciones desde México y Brasil podrían crecer

“Aunque los recortes de tasas de Banxico han reducido el carry del peso mexicano, el efecto sobre el peso ha sido limitado, y todavía mantiene un perfil atractivo ajustado por riesgo”, señala el documento elaborado por Gabriela Soni y Alejo Czerwonko.

La entidad financiera ajustó sus previsiones para el tipo de cambio en los próximos trimestres, con nuevos niveles estimados de MXN$18,8 para septiembre de 2025, MXN$19,0 para diciembre, MXN$18,8 para marzo de 2026 y MXN$18,5 para junio de ese año.

Hoy el tipo de cambio ya cotiza sobre los MXN$18,57, según los datos recopilados por Bloomberg.

“Esperamos que la debilidad generalizada del dólar continúe, por lo que estamos reduciendo nuestras previsiones de cierre trimestral del tipo de cambio hasta junio de 2026”, explica el documento.

Entre los factores que presionan al dólar, UBS menciona las tensiones comerciales, la percepción de deterioro fiscal en Estados Unidos y la expectativa de un menor crecimiento económico. El reporte advierte que “los mercados anticipan un crecimiento más lento en EE.UU. y esperan que la Fed reanude los recortes de tasas, incluso mientras la inflación sube”.

En el caso de México, UBS pronostica una contracción del PIB de -0,4% en 2025. La actividad económica sigue sin mostrar señales claras de recuperación. La institución destaca que “la demanda externa se espera que permanezca débil, y el gobierno no puede ofrecer estímulos fiscales en medio de un proceso de consolidación”.

PUBLICIDAD

Para el banco suizo, la inversión se ha visto afectado en medio de la incertidumbre por los aranceles, la esperada renegociación del T-MEC y una reducción en el gasto público de infraestructura.

En cuanto al panorama inflacionario, el informe señala que la inflación general bajó a 4,3% en junio, mientras que la subyacente repuntó a 4,2%. En respuesta, el Banco de México ha optado por un tono más prudente y UBS anticipa recortes graduales en la segunda mitad de 2025, comenzando con un movimiento de 25 puntos base en agosto.

Ver más: El precio del dólar está barato en Colombia: las razones que explican su caída

Impacto arancelario

El análisis también aborda el nuevo arancel del 30% anunciado por el presidente Donald Trump sobre las importaciones mexicanas, efectivo a partir del 1 de agosto.

Sin embargo, los analistas aclaran que “las exportaciones que cumplan con los requisitos del T-MEC se espera que estén exentas, lo que reducirá significativamente el impacto general”.

UBS ajustó su estimación del tipo de cambio USDMXN y prevé niveles de hasta MXN$18,5 en 2026, respaldado por la resistencia del peso.

Sobre las recientes señalamientos del gobierno estadounidense sobre tres instituciones financieras mexicanas, CIBanco, Intercam y Vector Casa de Bolsa, UBS considera que “esto no es una señal de estándares regulatorios débiles en el sector bancario mexicano ni una indicación de riesgos sistémicos o de liquidez”.

Finalmente, la entidad financiera destaca que la posición de México como proveedor clave para Estados Unidos seguirá actuando como soporte para el peso. La revisión del T-MEC prevista para inicios de 2026 podría generar episodios de volatilidad, pero no cambiaría la tendencia estructural.

PUBLICIDAD