Bloomberg — A los bonos con vencimientos a más largo plazo les espera un septiembre traicionero, si la historia sirve de guía.
Durante la última década, los bonos del Estado a nivel mundial con vencimientos superiores a 10 años registraron una pérdida media del 2% en septiembre, según datos recopilados por Bloomberg. Es el peor rendimiento mensual del año.
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Esta tendencia preocupará a los inversores en renta fija, ya que la deuda a más largo plazo ya se ha quedado rezagada respecto a los vencimientos más cortos este año por la preocupación de que los gobiernos aumenten el endeudamiento para financiar las promesas de gasto. Lo que podría empeorarlo es la inflación pegajosa en Japón, la agitación política en Francia y la especulación de que el presidente Donald Trump pueda presionar a la Reserva Federal para que recorte las tasas de interés, amplificando las presiones sobre los precios en Estados Unidos.
“El mercado ahora mismo se siente francamente desagradable”, dijo Hideo Shimomura, gestor senior de carteras de Fivestar Asset Management Co. en Tokio. “Septiembre suele ser cuando la política monetaria da un giro brusco”, y un mes en el que el posicionamiento en previsión de movimientos suele aparecer, dijo.
Los datos de las nóminas estadounidenses del viernes suponen un riesgo a corto plazo para el mercado, ya que los operadores esperan confirmar las apuestas sobre un recorte de tasas de la Fed este mes. Los datos de inflación de la eurozona también están en el radar de los operadores, atentos a cualquier posible sorpresa, ya que en general se considera que los responsables políticos mantendrán las tasas estables la próxima semana.
Mientras tanto, Francia atraviesa una aguda crisis política que ha hecho subir los rendimientos en ese país, con el primer ministro François Bayrou buscando apoyos para una votación de confianza el 8 de septiembre.
Algunos como Chris Weston, jefe de investigación de Pepperstone Group, citan el típico repunte de septiembre en la emisión para la caída estacional de los bonos a largo plazo. Mohit Kumar, estratega jefe europeo de Jefferies International, coincide.
La estacionalidad de septiembre está “sobre todo relacionada con la emisión”, dijo Kumar. “No tenemos mucha emisión durante julio y agosto y luego no mucha después de mediados de noviembre”.
La subasta de bonos a 10 años de Japón del martes, seguida de una venta de bonos a 30 años a finales de esta semana, están siendo seguidas muy de cerca por los inversores. Están deseosos de calibrar la demanda de deuda del país en medio de los interrogantes sobre el liderazgo del primer ministro Shigeru Ishiba y las expectativas de subidas de tasas del Banco de Japón.
Lo que dicen los estrategas de Bloomberg
“Los operadores de JGB estarán atentos a la relación oferta/cobertura para la venta a 10 años de hoy, y todo lo que esté por debajo de 3,0 se considerará débil. La última vez que las métricas fueron similarmente decepcionantes fue en mayo, lo que coincidió con el inicio de una venta a lo largo de la curva japonesa. Una repetición probablemente desencadenaría una lectura negativa en todos los bonos del G-10 a medida que se refresquen los temas globales de subida de la curva”.
-Mark Cranfield, estratega macro.
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A escala mundial, los rendimientos de los bonos ultralargos han caído un 2,6% desde el 30 de junio, lo que los sitúa en camino de su primer descenso trimestral de 2025. Han recortado las ganancias en lo que va de año hasta el 3,5%, mientras que los pagarés a más corto plazo han subido un 7,9% en el mismo periodo.
Para Evelyne Gomez-Liechti, estratega de multiactivos de Mizuho International Plc. en Londres, unos datos estadounidenses más sólidos de lo esperado y un posible giro alcista del Banco de Japón son algunos de los catalizadores que podrían empeorar este mes la situación de los bonos.
Hay “muchos riesgos que sortear”, dijo.
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