Bloomberg — Las decisiones políticas del presidente Donald Trump brindan una “oportunidad única” para reforzar el papel internacional del euro y lograr que el bloque monetario goce de más privilegios de los que hasta la fecha se han reservado para EE.UU., afirmó la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde.
Legarde, afirmó que si los gobiernos de los países pueden solucionar los problemas que desde hace tiempo frenan el potencial económico de la Unión Europea (UE), podrían verse beneficiados con menores costos de endeudamiento, además de con protección ante las fluctuaciones monetarias y las sanciones, durante un discurso que pronunció en Berlín.

“Los cambios que se están produciendo abren la puerta al “momento global del euro”, manifestó este lunes. “Se trata de una gran oportunidad para que Europa asuma un mayor control de su propio destino. Sin embargo, no es un privilegio que se nos conceda porque sí. Debemos ganárnoslo”.
Las declaraciones evidencian cómo los responsables políticos de la región están tratando de sacar provecho de los ataques de Trump al comercio internacional y a las instituciones de EE. UU. Dichas aspiraciones han sido animadas por los inversionistas, que han vendido el dólar por el caos arancelario, lo que ha impulsado al euro en un movimiento que Lagarde ha calificado previamente de “condictorio”.
Ver más: Fortaleza del euro frente al dólar es por políticas erráticas de Trump: Lagarde
En su discurso de este lunes, recordó episodios en los que la acción estadounidense podría haber desafiado el papel del dólar como principal moneda de reserva, como la suspensión de la convertibilidad en oro por Richard Nixon en los años 70. Si bien entonces no existía una alternativa sólida, hoy existe el euro, “otra moneda internacional junto al dólar”, dijo Lagarde.
Según el informe más reciente del BCE sobre el tema, el papel internacional del euro se mantuvo “en general estable” en 2023. Lagarde identificó tres áreas clave para fortalecer su estatus global.
Primero, pidió una “base geopolítica sólida y creíble”, con un firme compromiso con el libre comercio respaldado por capacidades de seguridad.
Segundo, insistió en completar el mercado único, apoyar a las empresas emergentes, reducir la regulación y avanzar en la unión de ahorro e inversión, donde el progreso ha sido lento.
Lagarde también reiteró la necesidad de mayor financiación conjunta a nivel europeo para iniciativas como la defensa, una idea políticamente controvertida. Esto permitiría ampliar la oferta de activos seguros para los inversores.
“La lógica económica nos dice que los bienes públicos deben financiarse de forma conjunta”, afirmó. “Y esta financiación conjunta podría sentar las bases para que Europa aumente gradualmente su oferta de activos seguros”.
Ver más: El euro se perfila como refugio alternativo junto con los bonos alemanes
Estas declaraciones coinciden con las de Isabel Schnabel, miembro del Consejo Ejecutivo, quien sostuvo que un gran mercado de bonos europeo es un requisito clave para que el euro gane protagonismo.
Y tercero, Lagarde subrayó que Europa debe demostrar su capacidad para mantener una base jurídica e institucional sólida que sostenga la confianza de los inversores a largo plazo.
En otro acto en Berlín, el presidente del Bundesbank (Banco Central de Alemania), Joachim Nagel, coincidió con Lagarde en que Europa debe colaborar más estrechamente y fortalecer su resiliencia.
“Quizás fuimos demasiado ingenuos en el pasado al creer que las cosas siempre seguirían igual”, afirmó. “Ahora tenemos que trabajar en nosotros mismos. Tenemos que replantearnos el modelo económico europeo, nuestra política de defensa y cómo podemos ser más independientes”.
Lea más en Bloomberg.com