Bloomberg — Estados Unidos ha dejado de ser un destino seguro para los inversores extranjeros debido a los riesgos derivados del proyecto de ley fiscal y de gastos del presidente Donald Trump, según Raphael Gallardo, economista jefe de la gestora de activos francesa Carmignac.
Gallardo es el último comentarista del mercado en expresar su profunda preocupación por la Sección 899 del proyecto de ley. La disposición aumentaría las tasas impositivos para las personas y empresas de países cuyas políticas fiscales Estados Unidos considera “discriminatorias”, lo que ha llevado a algunos a bautizar la medida como el “impuesto de la venganza”.
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“Estados Unidos ya no es una nación segura para la inversión”, declaró Gallardo durante una sesión informativa sobre las perspectivas para el segundo semestre del año. Carmignac, que contaba con unos €34.000 millones de euros (US$39.000 millones) bajo gestión a finales de 2024, tituló su presentación “‘De Estados Unidos primero’ a la anarquía financiera mundial”.
El consenso de Wall Street es que la disposición fiscal minaría aún más la confianza en los activos estadounidenses, ya sacudida por las políticas comerciales de Trump y el deterioro de las cuentas fiscales de Estados Unidos. Podría desencadenar un desplome del 5% en el dólar y una liquidación del 10% en la renta variable, dijo esta semana el director de inversiones de Allianz SE, Ludovic Subran.
Para Gallardo, las impredecibles decisiones de Trump en materia comercial y las preocupaciones en torno a su política exterior y al Estado de derecho están impulsando a los aliados tradicionales de EE.UU. a reducir su dependencia y sus vínculos con la mayor economía del mundo.
“¿Por qué reducir el riesgo? Porque Estados Unidos se ha convertido en un aliado militar totalmente poco fiable, y por lo tanto, es necesario asegurar las cadenas de suministro y encontrar nuevos mercados”, dijo.
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Carmignac está diversificando las asignaciones de activos desde EE.UU., especialmente hacia Europa, donde las históricas reformas fiscales de Alemania han impulsado las perspectivas de crecimiento económico. El canciller alemán, Friedrich Merz, ha adoptado una serie de medidas para reforzar la capacidad militar, acelerar el gasto en infraestructuras y reactivar la economía mediante amplias exenciones del impuesto de sociedades.
“Trump ha conseguido lo que nadie había logrado antes, y es hacer que los alemanes empiecen a gastar”, dijo Gallardo.
Carmignac fue uno de los gestores de activos que predijo el repunte de las acciones mundiales el año pasado, desestimando las habladurías sobre una burbuja en los mercados de renta variable.
Las acciones europeas se han consolidado como claras ganadoras a nivel mundial este año, ya que la preocupación por las políticas comerciales de la administración Trump anima a los inversores a diversificar sus inversiones y a abandonar los activos estadounidenses. A finales de mayo, ocho de los diez índices bursátiles con mejor rendimiento del mundo eran europeos.
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