Bloomberg — El sector privado de la eurozona creció ligeramente en mayo, manteniéndose más resistente de lo estimado inicialmente a la incertidumbre creada por las erráticas políticas comerciales estadounidenses.
El índice compuesto de gestores de compras de S&P Global cayó a 50,2 desde los 50,4 de abril, manteniéndose justo por encima del umbral de 50 que separa el crecimiento de la contracción, según mostraron los datos del miércoles. La lectura inicial fue de 49,5.
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La ralentización se debió a un pequeño descenso de la actividad en el sector servicios, mientras que la producción manufacturera mostró el mismo crecimiento moderado que el mes anterior, según Cyrus de la Rubia, economista del Hamburg Commercial Bank.
“Para el resto del año, confiamos en que nuevos recortes de las tasas de interés clave por parte del Banco Central Europeo y el estímulo fiscal, en particular de Alemania, serán suficientes para compensar los efectos negativos de la subida de los aranceles y el aumento de la incertidumbre”, afirmó en un comunicado.
Los pronosticadores, incluido el Fondo Monetario Internacional, no ven que la producción del bloque de 20 naciones supere el 1% en 2025, un rendimiento que ha convencido al BCE para seguir bajando los costes de los préstamos. Se espera que el jueves lo haga por octava vez en este ciclo, situando la tasa de depósito en el 2%.
Debido a la gran incertidumbre creada por los ataques del presidente Donald Trump al libre comercio, los responsables políticos presentarán en Fráncfort escenarios alternativos para la economía junto a sus previsiones trimestrales. La mayoría de las exportaciones a EE.UU. se enfrentan actualmente a un gravamen del 10%, aunque Trump ha amenazado con elevarlo al 50% en julio. La Unión Europea está intentando conseguir una solución más favorable a través de conversaciones.
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La inflación, mientras tanto, retrocede. Las cifras del martes mostraron que los precios al consumo subieron un 1,9% en mayo, y que las presiones en el sector servicios, muy vigilado, se enfriaron notablemente.
Los PMI son seguidos de cerca por los mercados ya que llegan a principios de mes y son buenos para revelar tendencias y puntos de inflexión en una economía. Al ser una medida de la amplitud de los cambios en la producción más que de su profundidad, las encuestas empresariales a veces pueden ser difíciles de relacionar directamente con el PIB trimestral.
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