Bloomberg — El personal de la Universidad de Harvard aconsejó a los estudiantes internacionales que tuvieran cuidado con las publicaciones en las redes sociales y advirtió a algunos grupos que no llegaran al Aeropuerto Internacional Logan de Boston.
Representantes de la oficina internacional de Harvard y de un grupo de apoyo a la inmigración de la Facultad de Derecho de Harvard mantuvieron una llamada el jueves para proporcionar orientación a los estudiantes extranjeros después de que la universidad ganara una orden judicial preliminar contra los esfuerzos de la administración Trump para bloquear su capacidad de inscribir a esas personas.
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Los administradores de Harvard advirtieron a los estudiantes que los funcionarios del Departamento de Estado tienen la capacidad de revisar las cuentas de redes sociales de los solicitantes de visados de estudiante, mientras que la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos puede examinar los dispositivos electrónicos personales y rechazar la entrada basándose en su contenido, según los estudiantes que participaron, que pidieron no ser identificados porque la llamada era privada.
Los representantes de Harvard dijeron que no está claro si esta evaluación la realizan personas o inteligencia artificial y qué constituye exactamente una bandera roja, aunque los mensajes pro-palestinos, antisemitas o despectivos hacia EE.UU. parecen ser un foco de atención, según los estudiantes. Las interacciones previas con las fuerzas del orden, incluidas las infracciones menores, también atraerán la atención. Los representantes de Harvard advirtieron de que si se limpian los dispositivos se corre el riesgo de invitar a la sospecha, según los estudiantes.
Entre los anfitriones de la llamada se encontraban Maureen Martin, directora de los servicios de inmigración de Harvard, y Jason Corral, abogado de la clínica de inmigración y refugiados de la Facultad de Derecho de Harvard, dijeron los estudiantes. Un representante de la oficina internacional de Harvard declinó hacer comentarios.
Los representantes de Harvard aconsejaron a los iraníes y a los ciudadanos chinos que estudian en campos concretos, incluidos los de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, así como todo lo relacionado con la IA, que tengan especial precaución al viajar, según los estudiantes.
Los iraníes en concreto se han enfrentado a un mayor escrutinio en el aeropuerto de Logan y deberían volar en su lugar al aeropuerto internacional John F. Kennedy de Nueva York, dijo Corral en la llamada, según los estudiantes. No está claro si otros estudiantes internacionales se enfrentarían a procesos de inmigración más suaves en otros aeropuertos, pero varios participantes dijeron que salieron de la llamada con la comprensión de que JFK, el Aeropuerto Internacional O’Hare de Chicago y el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles pueden ser mejores opciones que Boston.
Kseniia Petrova, una investigadora de Harvard nacida en Rusia, fue detenida por funcionarios de inmigración en el aeropuerto de Logan en febrero a su regreso de Francia y acusada de intentar introducir de contrabando embriones de rana en el país. Fue puesta en libertad bajo fianza de la custodia federal por un juez de Boston en junio tras pasar cuatro meses detenida, pero acusada de cargos adicionales ese mismo mes.
Un representante de la Autoridad Portuaria de Massachusetts, que supervisa el aeropuerto Logan, remitió todas las preguntas a Harvard.
La Casa Blanca ha hecho de Harvard su principal objetivo en su misión de remodelar la enseñanza superior. Además del intento de tomar medidas enérgicas contra la inscripción de estudiantes internacionales, la administración Trump ha cancelado más de US$2.600 millones en fondos de investigación para Harvard y ha amenazado su estatus de exención de impuestos.
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El gobierno acusó inicialmente a la escuela de fomentar el antisemitismo, pero el ataque se ha ampliado desde entonces para incluir acusaciones de sesgo político y críticas a las iniciativas de diversidad en la contratación y las admisiones.
No está claro si los estudiantes de Harvard están siendo tratados de forma diferente a los de otras universidades. La administración Trump está apelando la medida cautelar sobre su prohibición de la inscripción de estudiantes internacionales de Harvard.
Con la ayuda de Greg Ryan y Judy Lagrou.
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