Bloomberg — Los funcionarios de la Reserva Federal mantuvieron estable su tasa de interés de referencia por segunda reunión consecutiva, aunque tienen expectativas de un menor crecimiento económico y una mayor inflación.
El Comité de Mercado Abierto de la Reserva Federal votó el miércoles a favor de mantener la tasa de interés de referencia de los fondos federales entre el 4,25% y el 4,5%, y dijo que ralentizaría aún más el ritmo al que está reduciendo su balance.
El gobernador Christopher Waller, partidario de mantener las tasas estables, disintió de la decisión sobre el movimiento del balance.
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La decisión de mantener las tasas estables se produce en un momento en que la ambiciosa y a menudo errática agenda política del presidente Donald Trump ha puesto a la economía, y a la capacidad de la Fed para mantenerla en el buen camino, bajo una presión cada vez mayor.
Los planes siempre cambiantes de Trump de imponer aranceles a los socios comerciales de Estados Unidos han avivado el temor a una desaceleración económica y han suscitado nuevas preocupaciones sobre la inflación, una combinación que podría arrastrar a los responsables políticos en direcciones opuestas.
“La incertidumbre en torno a las perspectivas económicas ha aumentado”, dijo el Comité en un comunicado. Los funcionarios también eliminaron el texto anterior que afirmaba que los riesgos para alcanzar sus objetivos de empleo e inflación estaban aproximadamente equilibrados.
Las nuevas previsiones de tasas muestran que una estrecha mayoría de funcionarios de la Reserva Federal prevé recortes de medio punto porcentual este año. Eso implica dos reducciones de tasas de un cuarto de punto, el mismo número que los funcionarios estimaron la última vez que emitieron proyecciones en diciembre.
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Los inversores, que en general esperaban que la Fed mantuviera las tasas sin cambios en esta reunión, escucharán pistas adicionales sobre cómo los funcionarios están teniendo en cuenta las políticas de Trump en sus perspectivas, y cómo podrían responder si las condiciones económicas se deterioran.
Creciente incertidumbre
En sus nuevas previsiones económicas, los funcionarios elevaron la estimación media de la llamada inflación subyacente, que excluye los volátiles precios de los alimentos y la energía, a finales de este año del 2,5% al 2,8%. Su previsión de crecimiento económico para 2025 se redujo del 2,1% al 1,7%.
Aumentaron su estimación del desempleo hasta el 4,4% a finales de este año, desde el 4,3% que veían en diciembre.
Los funcionarios de la Reserva Federal han mantenido estables las tasas este año, tras recortarlos un punto porcentual en los últimos meses de 2024. Desde diciembre, han señalado su deseo de ver más progresos en la inflación, y más claridad sobre el impacto de las políticas de Trump, antes de considerar otro movimiento.
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En ese tiempo, la inflación se ha mantenido elevada, mientras que las expectativas de los consumidores sobre el crecimiento futuro de los precios han aumentado en medio de una escalada de la guerra comercial. El gasto se ha suavizado y la confianza de los consumidores se ha deteriorado bruscamente.
Los inversores también han reaccionado negativamente, con el S&P 500 cayendo más de un 10% desde mediados de febrero antes de recortar parte de esas pérdidas.
La administración Trump ha hecho poco para aliviar los temores de recesión, con el presidente diciendo el 9 de marzo que la economía estadounidense se enfrenta a un “período de transición”. El secretario del Tesoro, Scott Bessent, ha dicho que la economía y los mercados financieros estadounidenses necesitaban una “desintoxicación”.
Hoja de balance
La Reserva Federal también anunció que, a partir de abril, reducirá de US$25.000 millones a US$5.000 millones el límite mensual de la cantidad de bonos del Tesoro de su balance que permite que venzan sin ser reinvertidos. El límite para los valores respaldados por hipotecas se mantendrá en US$35.000 millones. Waller prefirió mantener el ritmo actual.
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Varios funcionarios señalaron durante la reunión de enero del comité que podría ser conveniente considerar la posibilidad de pausar o ralentizar la reducción del balance de la Reserva Federal hasta que el Gobierno federal deje de tener que hacer frente al techo de deuda, el límite estatutario de la deuda pendiente del Tesoro. Estados Unidos alcanzó ese límite en enero.
La Reserva Federal empezó a ralentizar el ritmo al que reduce su cartera de activos en junio, en un intento de aliviar la posible presión sobre los tipos del mercado monetario.
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