Bloomberg — El presidente Donald Trump dijo que la economía estadounidense se enfrenta a “un periodo de transición”, desviando las preocupaciones sobre los riesgos de una desaceleración de Estados Unidos mientras su enfoque temprano en los aranceles y los recortes de empleos federales causan agitación en el mercado.
Cuestionado en Fox News sobre si espera una recesión este año, Trump dijo: “Odio predecir cosas así. Hay un periodo de transición, porque lo que estamos haciendo es muy grande”.
Aunque declinó abordar la cuestión, la respuesta de Trump coincide en líneas generales con su discurso ante el Congreso de la semana pasada y con una avalancha de comentarios recientes de altos funcionarios de la administración, incluido el secretario del Tesoro, Scott Bessent. En el centro del argumento del equipo de Trump está la perspectiva de recortes fiscales e ingresos arancelarios en el futuro que, según los funcionarios, estimularán la economía.
Las políticas arancelarias intermitentes de Trump han sacudido a los inversionistas, provocando una venta masiva de acciones tecnológicas y niveles de volatilidad no vistos en años. Bessent dijo el viernes en la cadena CNBC que la economía estadounidense necesita una “desintoxicación” para dejar de depender del gasto público y los operadores de bonos están señalando un riesgo creciente de que la economía estadounidense se estanque.
Trump marcó la pauta el 4 de marzo en su discurso ante una sesión conjunta del Congreso, reconociendo que puede haber un “periodo de ajuste” a medida que entren en vigor los aranceles. “Habrá una pequeña perturbación, pero estamos bien con eso”, dijo en su discurso. “No será mucho”.
La semana pasada se produjo la mayor caída del mercado bursátil desde que Trump fue reelegido hace cuatro meses.
El 6 de marzo, Trump descartó la idea de que su última marcha atrás sobre los aranceles contra México y Canadá tuviera alguna influencia en los inversionistas, diciendo: “Ni siquiera estoy mirando el mercado de valores” y culpando a “los globalistas que ven lo rico que va a ser nuestro país y no les gusta.”
El mercado bursátil estadounidense ha caído más de un 6% desde que tocó techo el 19 de febrero. Los inversionistas se han enfrentado a siete días consecutivos en los que el índice S&P 500 osciló al menos un 1% durante la sesión bursátil y las acciones tecnológicas como Nvidia y Tesla, que lideraron la subida del mercado durante los últimos tres meses, han recibido una paliza.
En su entrevista, grabada a finales de la semana pasada, Trump defendió su enfoque.
“Estamos devolviendo la riqueza a Estados Unidos”, dijo. “Eso es algo grande”.
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