Bloomberg — Las ventas pendientes de viviendas de segunda mano en EE.UU. cayeron por segundo mes consecutivo en julio debido a que los compradores potenciales se mostraron reticentes ante unos precios y unos costos de los préstamos aún elevados, en consonancia con la atonía del mercado inmobiliario.
Un índice de firmas de contratos bajó un 0,4% el mes pasado hasta 71,7, alrededor de donde ha permanecido durante gran parte del año, según los datos de la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR, por sus siglas en inglés) publicados este jueves. La estimación media de los economistas encuestados por Bloomberg preveía una caída del 0,2% en julio.
Los compradores han experimentado un ligero alivio recientemente, ya que las tasas cayeron a un mínimo de cuatro meses del 6,67% a principios de agosto, y se han mantenido cerca de ese nivel en las últimas semanas. Los costos de financiación, sin embargo, siguen siendo el doble de lo que eran a finales de 2021, un momento en el que muchos propietarios refinanciaron sus préstamos para aprovechar las tasas más bajas.
“Incluso con modestas mejoras en las tasas hipotecarias, la asequibilidad de la vivienda y el inventario, los compradores siguen dudando”, dijo en un comunicado el economista jefe de la NAR, Lawrence Yun.
Sin una caída sostenida de las tasas hipotecarias y unos precios de venta más favorables, las ventas de viviendas de segunda mano difícilmente superarán los 4 millones este año, un ritmo en el que se han estancado en los dos últimos años.
Mientras tanto, el ritmo de crecimiento de los precios se ha moderado al menos en todo el país, aumentando solo un 0,2% en julio con respecto a hace un año. Los precios han bajado incluso en los mercados inmobiliarios del oeste y el sur, antaño muy activos, donde más se ha acumulado el inventario.
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“El aumento de las solicitudes de hipotecas para la compra de vivienda es un primer indicador de que hay más compradores serios en el mercado, aunque muchos aún no se han comprometido con un contrato pendiente”, dijo Yun.
La firma de contratos en el Sur, la mayor región de venta de viviendas del país, disminuyó ligeramente. Las ventas pendientes también cayeron en el Medio Oeste y el Noreste, mientras que subieron un 3,7% en el Oeste.
Las ventas pendientes de viviendas suelen ser un indicador adelantado de las viviendas de segunda mano, ya que las casas suelen entrar en contrato uno o dos meses antes de venderse.
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