Bloomberg — Israel respondió al lanzamiento de cohetes desde el sur de Líbano mientras la frágil tregua de cuatro meses con Hezbolá mostraba nuevos signos de tensión, incluso cuando el grupo respaldado por Irán negaba su implicación.
Las Fuerzas de Defensa de Israel dijeron que estaban atacando posiciones de Hezbolá, incluyendo un sitio de comando y lanzadores de cohetes, el sábado después de que el primer ministro Benjamin Netanyahu instruyó a los militares para atacar “docenas de objetivos terroristas”. Medios locales libaneses, citando a personal de defensa civil, informaron de cuatro muertos, entre ellos un niño, y al menos 12 heridos en la ciudad de Toulin.
“Las FDI atacaron docenas de lanzaderas de cohetes de Hezbolá y un centro de mando desde el que operaban terroristas de Hezbolá en el sur del Líbano”, dijeron las FDI en X. Anteriormente, las FDI informaron de que interceptaron tres proyectiles que cruzaron a Israel desde territorio libanés cerca de la ciudad fronteriza de Metula.
Netanyahu y el ministro de Defensa, Israel Katz, ordenaron una segunda oleada de ataques contra objetivos de Hezbolá el sábado por la noche. Las FDI confirmaron unos minutos más tarde que aviones de combate estaban atacando objetivos libaneses.
“Hezbolá niega cualquier implicación en el lanzamiento de cohetes desde el sur de Líbano”, dijo el grupo en un comunicado en Telegram, calificando las acusaciones de Israel de “pretextos” para continuar los ataques.
Israel y Hezbolá iniciaron un alto el fuego a finales de noviembre, poniendo fin a un año de guerra. La tregua se ha mantenido en gran medida, aunque Líbano e Israel se han acusado mutuamente de incumplir sus condiciones. El sábado sonaron sirenas antiaéreas en la región por primera vez desde que se alcanzó el alto el fuego.
“El gobierno libanés es responsable de cualquier disparo efectuado desde su territorio”, declaró Katz en un comunicado. «No permitiremos la realidad de disparos desde Líbano contra las comunidades de Galilea».
El presidente libanés, Nawaf Salam, advirtió en un comunicado contra la reanudación de las operaciones en la frontera sur, mientras que el presidente Joseph Aoun, condenó los intentos de arrastrar al Líbano de nuevo a un ciclo de violencia tras meses de relativa calma.
El ejército libanés declaró haber descubierto y desmantelado “tres lanzacohetes primitivos” en el sur del país. La FINUL, la fuerza interina de la ONU en Líbano, se mostró alarmada ante una posible escalada de la violencia.
“La situación sigue siendo extremadamente frágil y animamos a ambas partes a que mantengan sus compromisos”, declaró la FPNUL en un comunicado.
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