El último recorte de tasas de Powell generó controversia

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Fed Chair Powell Holds News Conference Following FOMC Rate Decision
Por Jonathan Levin
12 de diciembre, 2025 | 06:38 AM

Es muy probable que Jerome Powell haya supervisado su última rebaja de las tasas de interés como presidente de la Reserva Federal. Esto seguramente avivará las tensiones con la Casa Blanca por el resto de su mandato, y tal vez más allá de este.

La Fed recortó las tasas de interés oficiales este miércoles en 0,25 puntos porcentuales, hasta ubicarlas en un rango de entre el 3,5% y el 3,75%, en lo que fue la tercera reducción de una serie de recortes aplicados este año con el fin de revertir parte del endurecimiento implementado durante el peor momento de la lucha contra la inflación entre 2022 y 2024.

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Tras la última medida, ahora la política monetaria está dentro del rango del 2,6% al 3,9%, que corresponde a las estimaciones de “neutralidad” de los presidentes y gobernadores de la Fed.

El propio Powell lo dejó claro:

Los ajustes realizados en nuestra política monetaria desde septiembre la ubican dentro de un rango de estimaciones razonables de neutralidad y nos permiten estar en una buena posición para determinar el alcance y el momento de los ajustes adicionales a nuestra tasa de política monetaria, en función de los datos que se vayan conociendo, la evolución de las perspectivas y el balance de riesgos.

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El mensaje implícito es que ahora la barra está significativamente más alta para que la Fed realice nuevos recortes. Los responsables políticos se encuentran ante la difícil tarea de equilibrar las dos caras de su doble mandato.

La inflación se sitúa ligeramente por encima de su objetivo del 2% (el índice de precios de consumo personal, un indicador de inflación muy usado, debería cerrar el año en torno al 2,9%), y el ritmo de contratación es excepcionalmente débil, lo que ha permitido un repunte insidioso de la tasa de desempleo, que aún es baja.

Como ninguna de las dos situaciones es ideal, las opiniones sobre la dirección de la política suelen depender de la valoración que hagan los responsables políticos de cuál es el riesgo mayor.

En última instancia, la postura expectante de Powell es la única sensata en este contexto, pero no lo protegerá de la ira del presidente Donald Trump.

Trump, quien ha exigido una reducción drástica de las tasas de interés y ha criticado personalmente a Powell, ha prometido reemplazar al presidente por alguien que espera que introduzca una política monetaria más flexible.

El director del Consejo Económico Nacional, Kevin Hassett, es considerado el favorito para el puesto, y declaró a Fox News antes de la decisión de este miércoles que el banco central tenía “amplio margen” para recortar las tasas.

No obstante, la Fed elabora la política monetaria en comisión, y es probable que a un nuevo presidente le resulte difícil impulsar recortes de tasas si los datos económicos no lo justifican.

La única salvedad es que el caso de la gobernadora de la Reserva Federal, Lisa Cook, aún está en la Corte Suprema. Si la corte da la razón a la administración Trump al permitir su destitución, podría sentar las bases para una reforma más profunda de la Fed.

Es perfectamente posible, por supuesto, que las circunstancias económicas cambien, incluso antes de que el mandato de Powell finalice en mayo.

Si la tasa de desempleo aumenta significativamente, las autoridades monetarias no dudarán en ofrecer apoyo, especialmente porque la debilidad del mercado laboral tiende a crecer como una bola de nieve. También es plausible que la inflación inmobiliaria se debilite aún más el próximo año y reduzca el aumento general de los precios.

Y, para ser claros, aún nos encontramos en el rango alto de las estimaciones de tasas neutrales plausibles de las autoridades monetarias. Por lo tanto, es muy posible que la Fed se sienta cómoda con la idea de volver a recortar si los datos se debilitan.

Lo que es muy improbable es que Trump muestre el mismo grado de paciencia. Y si surge algún otro conflicto, agravará el desafío de formular la política monetaria en un momento de incertidumbre y enviará señales contradictorias a los mercados que solo pueden avivar la volatilidad.

Esta nota no refleja necesariamente la opinión del consejo editorial de Bloomberg LP y sus propietarios.

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