Bloomberg — Meta Platforms Inc. (META) está dando a sus gafas inteligentes de un aspecto deportivo premium y un precio más alto.
Estas nuevas gafas Oakley Meta HSTN se venden a partir de US$399 y suben hasta US$500 para la edición limitada de lentes de espejo dorados. Aunque la tecnología interior es casi igual a la de las gafas Ray-Ban de US$299 de Meta, las Oakley brindan algo diferente: un estilo emblemático y deportivo que ayudaría a Meta a captar un público totalmente distinto.
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Al contrario que las Ray-Ban, que presentan un aspecto más tradicional, las Oakley están diseñadas para el movimiento, como el running (correr), el ciclismo y las aventuras en exteriores. Su diseño es más deportivo, por lo que son perfectas para capturar escenas dinámicas, con las manos libres y desde tu punto de vista.
La apuesta de Meta por lanzar más gafas inteligentes de alta gama, las primeras, aparte de las Ray-Ban en la modalidad sin pantalla, es significativa.
Se aprovecha del impulso de sus exitosas gafas Ray-Ban en momentos en que el sector de los wearables (dispositivos electrónicos que se llevan en el cuerpo) está en plena evolución, y Meta se propone sentar las bases de nuevas tecnologías como la realidad aumentada y la inteligencia artificial.
Las Oakley Meta HSTN, pronunciado How-stun, son más finas, ligeras y cómodas que los modelos anteriores. Son el resultado de la continua colaboración de Meta con EssilorLuxottica SA, la empresa matriz de las marcas Oakley y Ray-Ban.
El modelo HSTN de edición limitada es la primera de varias combinaciones de colores que se esperan para este verano, con las configuraciones más baratas a partir de US$399 (el precio varía en función del tipo de lente, como estándar, polarizada y transiciones).
Al igual que las anteriores gafas inteligentes de Meta, las Oakley vienen con un estuche de carga que hace las veces de batería portátil. Es cómodo, sólo hay que dejar caer las gafas dentro para recargarlas, pero es notablemente más voluminoso y pesado que el estuche más elegante de las Ray-Ban. Meta afirma que se tarda aproximadamente una hora en cargar las monturas y 3,5 horas en recargar el estuche mediante un cable USB-C.
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La calidad de video recibe una sólida actualización, con una nueva cámara 3K que proporciona un salto respecto a la resolución 1080p de las Ray-Ban. Ahora puede capturar hasta 60 minutos de video y hacer fotos de 12 megapíxeles. La calidad de las fotos es decente con buena iluminación, pero sigue sin estar a la altura de un smartphone, y las tomas con poca luz son en su mayoría inutilizables.
Todavía puede hacer fotos y videos tocando el botón de captura o diciendo el comando “Hey Meta”. Pero la colocación de los botones sigue siendo delicada. Tras prestar las gafas a mis colegas, acabé con un puñado de tomas accidentales.
Todo lo que capture se sincroniza con la aplicación Meta View y se guarda automáticamente en su teléfono. Borre un archivo en una, y desaparecerá de ambas.
Al igual que las Ray-Ban, las Oakley tienen dos pequeños círculos negros en la parte delantera: uno es la cámara; el otro, un indicador LED que se enciende mientras se graba. Una luz en el interior de la montura también aparece mientras se captura video, pero es lo suficientemente sutil como para que me encontrara grabando sin darme cuenta.
Puede escuchar música, atender llamadas y enviar mensajes de texto mediante comandos de voz, y la calidad del audio es sorprendentemente buena. Escuché música en el tren sin llamar la atención, pero en entornos silenciosos, el asistente de voz era audible para algunas personas cercanas. El volumen se sigue ajustando deslizando el dedo por la sien.
La tecnología de IA de Meta está, por supuesto, incorporada. Puede hacer cosas como mirar en su frigorífico y pedirle ideas para recetas, aunque tendrá que mover físicamente los artículos para que la cámara los reconozca correctamente. Meta AI también puede recordar dónde aparcaste tu autmóvil tomando una foto de referencia o traducir conversaciones en directo.
Hay atisbos de verdadera promesa, incluso si la tecnología todavía se siente como un trabajo en progreso.
Durante la cena, levanté el menú y le pedí a la IA que me sugiriera un cóctel que no fuera demasiado dulce. Respondió que no podía ayudar con la disponibilidad de productos o precios, pero señaló que la capacidad está por llegar.
Las gafas no son perfectas. Tampoco son un sustituto adecuado para su iPhone o dispositivo Android. Pero son un accesorio divertido, sobre todo cuando tiene las manos ocupadas.
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