Bloomberg Línea — El dólar digital en el mercado paralelo ha mantenido su tendencia a la baja en Bolivia tras el anuncio del paquete de 11 medidas y siete decretos del Gobierno para contener la delicada situación económica del país, que generan escepticismo entre los analistas.
El presidente del Colegio Departamental de Economistas de Tarija, Fernando Romero, dijo a Bloomberg Línea que antes de que el Ejecutivo anunciara el paquete de 11 medidas y siete decretos el pasado viernes, el precio del dólar digital en el mercado paralelo ya mostraba una tendencia a la baja.
De hecho, el 19 de mayo, el dólar digital en el mercado paralelo en Bolivia estaba en Bs.17,90 y al 28 de mayo bajó a Bs.16,35, indicó el economista.
Aun así, advirtió que las recientes medidas del Gobierno boliviano frente a la crisis cambiaria y la inflación son “coyunturales” y no atacan los problemas estructurales de la economía nacional, como la escasez de dólares, la falta de carburantes y el deterioro del poder adquisitivo.
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Posibles efectos de las medidas sobre YPFB

A pesar de esto, dijo que uno de los anuncios más relevantes fue la decisión de prohibir a la empresa estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) realizar operaciones con activos virtuales.
Según el presidente Luis Arce, “YPFB no ha realizado ninguna operación con criptoactivos. Sin embargo, se ha generado mucha especulación en torno a ese tema, lo que afecta las expectativas sobre el tipo de cambio. Esta medida elimina esa distorsión”.
“Cuando se ha indicado que YPFB ya no va a adquirir activos virtuales para comprar carburantes, ha bajado notablemente la incertidumbre y especulación en el mercado paralelo, si hablamos específicamente del dólar digital”, sostuvo el presidente del Colegio Departamental de Economistas de Tarija.
A juicio de Fernando Romero, esta medida en particular contribuyó a una caída en la cotización del dólar digital, con una tendencia que podría llevarlo a estabilizarse “tal vez cerca de los Bs.15”, aunque advirtió que esto dependerá del entorno económico y político, que sigue siendo incierto. “Hay indicios al parecer de que posiblemente las elecciones nacionales no se lleven a cabo”, alertó.
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“Son medidas cortoplacistas”

Pese a las nuevas disposiciones del Ejecutivo boliviano, señaló que la escasez de carburantes persiste en el país.
Hasta el martes 27 de mayo no se había abastecido al 100% el mercado del eje central, es decir, La Paz, Cochabamba y Santa Cruz, como se había prometido, subrayó.
Asimismo, Romero mencionó que si bien las medidas buscan frenar la inflación, proteger la canasta básica familiar y recuperar el poder adquisitivo, su efectividad es una interrogante.
Enfatizó que esto ocurre en un contexto en el que el poder adquisitivo de la moneda local se ha restado más del 70% en los últimos 12 meses y el tipo de cambio paralelo frente al dólar ha aumentado más del 150%.
“Estas son medidas cortoplacistas, coyunturales, más pensadas para dar oxígeno político y económico al Gobierno de cara a las elecciones. Han sido resultado de presiones de varios sectores, entre ellos económicos, políticos y sociales”, afirmó Romero.
En ese sentido, lamentó que no se hayan adoptado reformas de fondo: “Los problemas estructurales como la escasez de carburantes, la falta de dólares y la inflación van a persistir. Tal vez desaceleren un poco sus fenómenos negativos, pero no se espera que una crisis de más de 10 años se resuelva en tres meses”.
En este sentido, sostuvo que el país requiere un cambio de modelo y que se impulse una economía de mercado abierta a la inversión extranjera.
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Otras medidas implementadas por el Gobierno incluyen el combate al contrabando, el control en la venta de combustibles, la habilitación de productos de ahorro indexados a la Unidad de Fomento a la Vivienda (UFV, un índice referencial diario que refleja la evolución de los precios en Bolivia), entre otros.
La administración del presidente Luis Arce señaló que estas medidas se implementarán de forma inmediata y se complementan con la aprobación de siete decretos.
Arce dijo que estas medidas “buscan preservar el poder adquisitivo, garantizar el abastecimiento de productos esenciales y frenar los efectos especulativos que se están produciendo en los precios”.
“No estamos enfrentando esta crisis por mala gestión, sino por el estrangulamiento financiero que impone la Asamblea Legislativa al no aprobar más de US$1.800 millones en créditos que están paralizados”, según el mandatario, que ya ha anunciado que no buscará la reelección en medio de su baja popularidad.
En medio del contexto de la escasez de bienes básicos en el país, la inflación en Bolivia escaló al 15,01% interanual en abril, informó este mes el Instituto Nacional de Estadística boliviano.
La inflación interanual fue la más alta en los últimos 17 años y cuatro veces más que la registrada en abril de 2024, de acuerdo al Colegio Departamental de Economistas de Tarija.