Ciudad de México — El posible cierre del estrecho de Ormuz por parte del Gobierno de Irán puede impactar el precio de las gasolinas en México, advirtió la presidenta del país, Claudia Sheinbaum este lunes durante su conferencia de prensa en Palacio Nacional.
Ver más: México registra récord en importaciones de gas natural de EE.UU. y reduce las de combustible
“Podría impactar si sube el precio de las gasolinas porque nuestra referencia es internacional”, comentó la mandataria mexicana.
Después de que el Gobierno estadounidense bombardeó supuestas instalaciones nucleares, el parlamento de Irán aprobó el cierre del estrecho de Ormuz, una región estratégica para el mercado mundial por el tránsito marítimo de petróleo, el domingo 22 de junio.
México cuenta con un mecanismo para contrarrestar el aumento de las gasolinas, un subsidio al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios a combustibles, precisó la mandataria.
“(El subsidio) entraría en vigor en caso de que hubiera un aumento en el precio internacional de la gasolina”, comentó.
Las autoridades mexicanas acordaron un precio máximo de la gasolina de MXN$24 por litro con empresarios durante seis meses que terminan en agosto de este año.
Ver más: Acuerdo en México sobre precio máximo de gasolina es iniciativa de largo plazo: Sener
Sheinbaum también dijo que, hasta ahora, el impacto al precio del petróleo ha sido “muy poco” en los últimos días.
El precio de la Mezcla Mexicana de Exportación pasó de US$60 a US$70 por cada barril de petróleo crudo, un aumento de 16% entre el 10 y 20 de junio, según datos de la empresa estatal Pemex.
La presidenta de México mencionó que la producción de petróleo y combustibles en las ocho refinerías de la empresa estatal Pemex alcanzará para cubrir la demanda de gasolina y diésel en el país, mientras su Gobierno trabaja en un esquema financiero para los “próximos años”.
“Todavía hay una parte de turbosina que se tenga que importar. Eso nos hace soberanos. Hay un parte del gas natural... que todavía nos queda por trabajar”.
México registra un nivel récord de importaciones de gas natural, un combustible estratégico para la generación de electricidad, desde Estados Unidos mientras las compras de gasolina han comenzado a reducirse.
