Ciudad de México — Grupo Bimbo (BIMBOA), la mayor empresa panificadora a nivel global, recibió un cambio de perspectiva crediticia por parte de S&P Global Ratings, en medio de un mayor nivel de apalancamiento, que se está combinado con un entorno macroeconómico desafiante.
La decisión de S&P implicó la modificación de la perspectiva de estable a negativa, lo que se traduce en una posible baja en la calificación en los próximos 12 a 24 meses, si el índice de deuda neta a EBITDA ajustado se mantiene en 3x o por arriba, dijo la calificadora en un comunicado.
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“La empresa afronta un escenario económico desafiante”, dijo S&P.
Si bien la calificadora espera que Bimbo logre incrementar sus ingresos y EBITDA, así como disminuir sus salidas de efectivo hacia 2026, existen vientos en contra que deberá enfrentar los próximos meses.
S&P está considerando la desaceleración económica en varios mercados, que se suma a la incertidumbre provocada por la probabilidad de aplicación de aranceles, una combinación que podría resultar en una ligera contracción de la economía mexicana, un estancamiento de la economía canadiense y un menor dinamismo en Estados Unidos, tres de los principales mercados de Bimbo.
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El próximo 2 de abril, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tomará una decisión al respecto del establecimiento de aranceles recíprocos en contra de países con los que mantiene comercio, incluidos Canadá y México, sus socios en el T-MEC. Actualmente, S&P está incorporando en su escenario base tarifas generalizadas a partir del 2 de abril hasta el primer semestre de 2026.
Bajo este mismo escenario, S&P redujo recientemente la calificación crediticia de Rotoplas, una empresa mexicana de soluciones de agua, que cotiza en la Bolsa Mexicana de Valores.
S&P no es la única, otras calificadoras también han modificado su perspectiva ante la incertidumbre económica. Recientemente Moody’s cambió su perspectiva del sistema bancario de México, desde positiva hasta negativa, ya que considera que enfrentan desaceleración del crecimiento económico en 2025 debido a la disminución del gasto público y cambios institucionales, así como incertidumbres en torno a las relaciones comerciales con Estados Unidos.
