Fondos, ETF y acciones: una guía práctica para comenzar a invertir

Desde América Latina es posible acceder a acciones, ETFs y fondos globales con bajo monto. Analistas ofrecen una guía práctica para comenzar a invertir más allá del depósito a plazo.

Brazil Futures Fall Amid Precatorios Bill Hurdles, More Earnings
19 de julio, 2025 | 07:00 AM

Bloomberg Línea — Los certificados de depósito a plazo han sido una de las opciones de los inversionistas más conservadores en América Latina. Su simplicidad, seguridad y rendimiento conocido los convierten en una herramienta cómoda, sobre todo en entornos de incertidumbre económica.

Ver más: El dólar se debilita, pero América Latina no tiene el camino despejado para aprovecharlo

PUBLICIDAD

Pero a medida que comienzan a bajar las tasas se reduce la rentabilidad real de estos instrumentos, lo que ha llevado a muchos a preguntarse qué alternativas existen sin comprometer su tranquilidad financiera.

Dar el paso más allá del plazo fijo no implica lanzarse al riesgo. Existen opciones intermedias que permiten construir una cartera diversificada, con riesgos controlados y horizontes de inversión más amplios. La clave está en entender cómo funcionan los instrumentos disponibles, definir un perfil de riesgo y apoyarse en herramientas reguladas y profesionales.

Jimmi Astocóndor, economista de la Pacífico Business School, aseguró que en las “inversiones se sugiere que se inicie con instrumentos de inversión de muy bajo riesgo y/o conservador, y luego se vayan migrando según el perfil a instrumentos de riesgo moderado”.

Mercado se volcaría a activos de refugio a la espera de respuesta de Irán a ataque de EE. UU.

Es decir, el paso a la renta variable no tiene que ser inmediato ni total, pero puede comenzar por caminos gestionados, diversificados y con soporte técnico.

La puerta de entrada

Una de las recomendaciones más comunes entre asesores financieros es comenzar a diversificarse mediante fondos mutuos. Se trata de vehículos que agrupan el dinero de múltiples inversionistas para ser administrados por un gestor profesional, que lo invierte en una variedad de activos como bonos, acciones o instrumentos del mercado monetario.

Esta diversificación ayuda a mitigar riesgos específicos y facilita el acceso a mercados que, de forma individual, serían difíciles de alcanzar.

Ver más: ¿Conviene comprar acciones de MercadoLibre, Galicia y Pampa? Esto cree Bank of America

PUBLICIDAD

Astocóndor recomienda los fondos de corto y mediano plazo, con portafolios que “se focalizan en papeles comerciales, depósitos y bonos corporativos”. También señala los fondos de factoring como una alternativa conservadora, respaldados por cuentas por cobrar de empresas con buen perfil crediticio.

Para quienes desean ir un poco más allá, los ETF (fondos cotizados en bolsa) son otra herramienta clave. Gregorio Gandini, analista financiero, indicó que “la compra de ETF puede ser muy interesante, todo ajustado al perfil de riesgo y conocimiento de cada inversionista”.

Estos fondos replican el comportamiento de índices como el S&P 500 o el MSCI World, permitiendo exposición a cientos de compañías globales mediante una sola inversión.

Fondos mutuos, ETFs y REITs permiten diversificar por sectores, regiones y tipos de activo, reduciendo la exposición a eventos específicos.

Al estar compuestos principalmente por acciones, los ETF permiten un primer acercamiento a la renta variable, es decir, a activos cuyo rendimiento no está garantizado y depende directamente del comportamiento del mercado. Su principal atractivo radica en el potencial de rentabilidad que ofrecen frente a otros instrumentos más conservadores.

Según Pictet Asset Management, “entre 1928 y 2023, la rentabilidad anual media de las acciones del S&P 500 fue del 6,5%, muy por encima del bono de EE.UU. a 10 años (1,5%) o las letras del Tesoro a tres meses (0,2%)”.

Sin embargo, su mayor volatilidad implica que deben considerarse como inversiones de largo plazo, y no con expectativas de ganancias inmediatas.

BBVA también subraya que “las inversiones de renta variable están sujetas a la volatilidad del mercado”, y que, aunque pueden generar “ganancias significativas”, implican también la posibilidad de pérdidas.

Ver más: Para Deutsche Bank, la regla fiscal de Colombia está muerta y hay que reemplazarla

Por ello, recomienda contar con un horizonte de largo plazo, asesoramiento profesional y evaluar siempre la tolerancia al riesgo.

Desde Banco Santander, advierten que este tipo de activos “no tienen rendimientos fijos ni garantizados, sino que fluctúan en función de las condiciones del mercado”, lo que significa que es posible obtener altas rentabilidades, pero también pérdidas significativas.

Una de las claves para minimizar los riesgos es entender el activo en el que se está invirtiendo. “Es importante investigar sobre la empresa y su sector; entender su modelo de negocio, es decir, cómo gana dinero; eso ayudará a evaluar su estabilidad y potencial de crecimiento”, aconseja el banco.

Placa da rua de Wall Street

Invertir en Wall Street

Una opción para entrar en la renta variable es acceder a los mercados de Wall Street desde América Latina, a través de plataformas digitales reguladas, sin necesidad de residir en Estados Unidos ni contar con un capital elevado.

Plataformas tecnológicas y aplicaciones locales permiten acceder a acciones, ETFs y fondos globales desde países como Costa Rica, Colombia, México o Perú, con montos de entrada desde US$10.

Gandini mencionó, en el caso de Colombia, algunas opciones confiables. “Una que ha ido cobrando mucha fuerza es Trii, que ha ampliado su acceso. También eToro e Interactive Brokers son algunas disponibles”, dijo. En el caso peruano, Astocóndor sumó la app Bolsapp de Grupo Coril SAB, supervisada por la Superintendencia del Mercado de Valores.

Ver más: Deutsche Bank ve más riesgos para América Latina y dice que el dólar débil no se irá pronto

Otra alternativa es abrir una cuenta en brókers online internacionales con operación en América Latina como los ya mencionados eToro, Interactive Brokers o TD Ameritrade.

Estas plataformas permiten invertir directamente en acciones, ETFs y bonos del mercado estadounidense, con montos iniciales bajos, interfaces simples y procesos 100% digitales.

“Antes de contar con alguno, hay que revisar bien las comisiones y costes de cada operación o si cobra una tarifa mensual; prestar atención a la facilidad de uso de la plataforma o aplicación y verificar si está incluido en los registros oficiales del regulador”, recomiendan desde Santander.

Los movimientos de los grandes

Para iniciar, los inversionistas pueden tomar como referencia las estrategias de los grandes bancos globales. Deutsche Bank, por ejemplo, publica cada trimestre su Fresh Money Conviction List, una selección de 38 acciones recomendadas para obtener retornos superiores al mercado. Desde su creación en 2017, esta lista ha generado un retorno acumulado de 252%, frente al 192% del S&P 500.

Deutsche Bank AG Branches As Bank Posts Surprise Quarterly Loss

Entre las compañías destacadas por el banco alemán para el tercer trimestre de 2025 están Amazon, Meta Platforms, Equinix, Eli Lilly y Blackstone.

En palabras de sus analistas, se trata de empresas “con fundamentos, catalizadores de corto y mediano plazo y liderazgo sectorial”, seleccionadas por su resiliencia y potencial de crecimiento en entornos económicos exigentes.

Otra forma de acercarse al mercado global es observar las carteras recomendadas por firmas como JPMorgan o Bank of America, que actualizan periódicamente sus estrategias regionales.

Para América Latina, JPMorgan mantiene una selección de acciones clave en Brasil, México, Chile y Argentina. Algunas de sus apuestas son Nubank, Embraer, Coca-Cola Femsa, Vale y Credicorp.

Bank of America, por su parte, destacó en su último informe que “América Latina continúa superando al resto del mundo” en rendimiento bursátil, y subraya su preferencia por empresas expuestas al consumo interno, bancos sólidos como Itau Unibanco y tecnológicas regionales como MercadoLibre.

Ver más: De MercadoLibre a América Móvil: el listado del BofA para invertir en América Latina

Estas listas no son recetas infalibles, pero sí funcionan como brújula para entender qué sectores y compañías concentran el interés de los gestores institucionales, y pueden ayudar a tomar decisiones más informadas.

Para quienes inician desde cero, Astocóndor sugiere una asignación conservadora. “Un 80% en renta fija, relacionado a operaciones de plazo fijo, fondos mutuos conservadores o bonos corporativos, y un 20% en acciones locales e internacionales”, recomienda. Esta proporción puede adaptarse con el tiempo, a medida que el inversionista se familiariza con los mercados.

Para Santander, un aspecto fundamental es el perfil del inversionista, por lo que hay que evaluar la tolerancia al riesgo y cuánto se está dispuesto a perder en busca de un mayor rendimiento. Si la volatilidad genera incomodidad, puede ser preferible optar por productos más estables o por una diversificación amplia que reparta los riesgos.

Conocer el perfil de riesgo, diversificar bien y seguir estrategias profesionales son claves para invertir más allá del plazo fijo.

En todo caso, Gandini recomendó analizar las experiencias pasadas con honestidad si hubo pérdidas. “Revisar muy conscientemente dónde se falló para no repetirlo. Por ejemplo, si se asumió mucho riesgo, volver a revisar el perfil de riesgo y qué tipo de inversión puede funcionar que sea compatible”, concluyó.

Los analistas de Santander también sugieren evitar errores comunes como dejarse llevar por el impulso o las redes sociales. “Evitar el ‘efecto manada’: no se dejen llevar por las redes sociales, una moda o por recomendaciones sin investigar por su cuenta. No se dejen llevar por la emoción y tomar decisiones basadas en datos”, aseguraron.

Finalmente, la recomendación central es abordar la renta variable con una perspectiva de largo plazo. “Es preferible cuando se manejan periodos de tres años o más. No invertir en algo que no se termina de entender. Si el tema los supera o no tienen tiempo para investigar por ustedes mismos, hay que buscar un asesor financiero para que ayude a construir una estrategia de inversión adecuada para tu perfil”, concluyeron.

PUBLICIDAD