Bloomberg — Las acciones, el efectivo, el oro y los bonos están listos para recibir algunas de las mayores entradas anuales registradas en un mercado que está viendo cómo se rompen las correlaciones tradicionales entre las clases de activos.
Ver más: S&P 500, Dow y Nasdaq cierran en máximos históricos tras datos de inflación moderada
Los fondos de renta variable se encaminan hacia unas entradas de US$693.000 millones en 2025 según las cifras anualizadas del año hasta la fecha, según cálculos de Bank of America Corp (BAC) a partir de datos de EPFR Global. Sería la tercera cifra más alta de la historia, escribieron los estrategas del banco en una nota.
Los fondos de efectivo van camino de atraer US$1,1 billones, su segunda mayor entrada. Los inversores se disponen a verter cantidades récord en oro y bonos con grado de inversión, con US$108.000 millones y US$415.000 millones, respectivamente.

Las impredecibles políticas comerciales estadounidenses han estado en el centro de un año turbulento en los mercados que ha puesto a prueba la capacidad de los inversores para elegir entre distintas clases de activos. El debate sobre la trayectoria de las tasas de interés de la Reserva Federal y un cierre del gobierno estadounidense que ha creado un vacío de datos económicos han complicado aún más el panorama.
Aún así, las acciones se han disparado hasta alcanzar récords, al tiempo que el aumento masivo del gasto en inteligencia artificial se mantiene, mientras que los beneficios y la economía siguen siendo sólidos. Los rendimientos de los bonos han retrocedido a medida que caen los costes del endeudamiento mundial, mientras que el oro se ha disparado a máximos históricos por su atractivo como refugio en tiempos de incertidumbre.
El macrooperador de Goldman Sachs Group Inc (GS), Bobby Molavi, observó a principios de esta semana que las correlaciones históricas entre los bonos, la renta variable y el oro se han “tirado por la ventana”, y que éste “sigue siendo un mercado posmoderno en muchos sentidos”.
--Con la colaboración de Michael Msika.
Lea más en Bloomberg.com









