Bloomberg Línea — Las acciones de Boeing (BA) cayeron en Wall Street el jueves, luego de que un avión 787 Dreamliner de Air India se estrellara poco después de despegar desde Ahmedabad rumbo a Londres, con 242 personas a bordo.
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Se trata del primer siniestro total que involucra a este modelo de fuselaje ancho, considerado uno de los más avanzados tecnológicamente en la flota de la compañía. La acción cayó 4,79% y fue el título que más perdió en el S&P 500.
El mercado reaccionó con ventas inmediatas, en un contexto donde los inversores siguen mostrando una sensibilidad creciente ante cualquier incidente vinculado a la seguridad aérea.
La aerolínea confirmó el fallecimiento de 241 personas. El único superviviente está siendo atendido en un hospital, según informó la aerolínea.
“Aunque todavía no se han desvelado las causas, los inversores están recortando posiciones en el valor”, señaló Javier Cabrera, analista de XTB Latam.
El especialista recordó que, aunque el 787-8 no fue el modelo implicado en los accidentes de 2018 y 2019, protagonizados por el 737 MAX, el nombre Boeing vuelve a quedar bajo escrutinio. “De nuevo Boeing está en el ojo del huracán”, dijo.
El avión involucrado tenía casi 12 años de servicio y estaba propulsado por dos motores GEnx de General Electric (GE).
Según Bloomberg, Air India opera actualmente 34 unidades del modelo 787, y el siniestro corresponde al vuelo AI171, que impactó en una zona residencial poco después del despegue, dejando más de 200 muertos, según cifras oficiales.
Boeing aún enfrenta el recuerdo reciente de otros problemas de fabricación. En 2023, un ingeniero de la compañía denunció fallas estructurales en el proceso de ensamblaje del 787, acusaciones que la empresa negó.

Además, la semana pasada se conoció que la firma acordó pagar US$1.100 millones para evitar ir a juicio por los dos accidentes del 737 MAX ocurridos en 2018 y 2019, en los que murieron 346 personas.
La acción sigue cotizando un 50% por debajo de sus máximos históricos, pero su rol estratégico dentro del sector aeronáutico estadounidense la mantiene como un actor clave en el duopolio global que comparte con Airbus, según Cabrera.
En palabras del analista, “la compañía sigue en pie por la importancia capital que tiene para Estados Unidos, en su competencia contra Airbus, la otra empresa del duopolio que controla el mercado y que tiene procedencia europea”.
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George Ferguson y Melissa Balzano, analistas de Bloomberg Intelligence, recordaron que la aerolínea opera siete 787-9 y 27 787-8, todos ellos con motores GE. “Los datos de Cirium indican que ningún avión tiene menos de 2,3 años, por lo que cualquier defecto de fabricación probablemente ya habría salido a la luz”, señalaron.
Esta historia se actualizó al cierre del mercado.